Cuando los hombres armados llegaron a la casa ubicada con el número 210 de la calle Santa Carolina, de la colonia Santa María, lo primero que hicieron fue empuñar sus armas largas y cortas que traían e ingresaron en forma de asalto a la casa; ya dentro, preguntaron por una persona, pero al no encontrarla, ejecutaron la orden que tenían: matar a todos los que hubiera en ese lugar.
Esa fue una de las versiones que habitantes de la zona escucharon después de perpetrado el ataque, pues incluso los agresores, tras haber perpetrado el multihomicidio, amenazaron a quienes estaban en la calle en ese momento y querían saber de dónde provinieron los más de 30 balazos que se escucharon durante la noche del sábado.
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La Fiscalía General del Estado dio a conocer que en el ataque fueron utilizadas armas cortas y largas, los casquillos percutidos de estas armas fueron solo unos de los indicios recabados en la escena por agentes ministeriales.
Identifican a asesinados
De las siete personas que fueron asesinadas, la mayoría eran jóvenes que no rebasaban los 25 años de edad.
De cinco jóvenes pudo conocerse la identidad y éstos respondían a los nombres de Vicente, Gustavo, Rogelio, Nicolás y Miguel, ninguno tenia mas de 25 años. También fue identificado otro hombre, a quien llamaban Luis y una mujer que sólo ha sido identificada como “La Flaquita”.
Vecinos indicaron que dos de ellos, Rogelio y Vicente, eran hermanos y desde muy jóvenes comenzaron a dedicarse a hacer artesanías, pero su fuerte era la elaboración de canastas para fresas y para recuerdos, además de otros adornos.
Gustavo, Nicolás y Miguel eran sus primos y en ocasiones les ayudaban a vender sus creaciones en los paradores y cruces semaforizados.
Algunos familiares que llegaron a la zona se encontraban destrozados, pues no podían creer lo que había sucedido ni tampoco que el asesinato haya sido tan crudo. Y es que de acuerdo con las versiones de testigos, los atacantes buscaban a otro de los presentes y al no recibir respuesta, decidieron matarlos a todos.
Camioneta en la que viajaban atacantes fue robada en Silao
Tras cumplir con su objetivo, los atacantes subieron de nuevo a la camioneta donde les esperaba el conductor, mismo que aceleró a fondo con rumbo hacia el Cuarto Cinturón Vial.
Hubo quienes alcanzaron a ver que la camioneta tenia el logotipo de la empresa Mecánica de Suelos CM Control de calidad y después se supo que la unidad había sido robada presuntamente y fue en la que habrían viajado quienes perpetraron el asesinato; además, pudo conocerse también que otras dos unidades intentaron ser robadas en la huída de los delincuentes, pero no lo lograron.
La camioneta estaquitas fue abandonada sobre el tramo que comprende el Libramiento Norte y corrieron y atravesando un campo de fresas, en dirección hacia El Carrizalito y no se supo más de ellos.
Tras checar el número de serie de la camioneta abandonada autoridades corroboraron sus sospechas, la unidad había sido robada, de acuerdo con la FGE tenía pocos días que esta fue despojada a su propietario en el municipio de Silao, la misma fue asegurada después de realizar los peritajes en busca de huellas u otros indicios al interior de la misma.
Había una fiesta y los asesinaron
Organización Editorial Mexicana dio a conocer que el hecho ocurrió sobre la calle Santa Carolina, apenas unos minutos después de las 10:08 de la noche.
En el domicilio se estaba llevando a cabo una fiesta, en la que había varias personas de no más de 30 años de edad, tenían música a alto volumen y se encontraban ingiriendo bebidas alcohólicas y botana.
De pronto varios sujetos fuertemente armados llegaron en una camioneta tipo Nissan estaquitas con la caja trasera color blanca, el copiloto y al menos dos hombres más bajaron de la misma e ingresaron con facilidad al inmueble del cual de acuerdo con testimonios se encontraba la puerta entre abierta, pues la vivienda está en obra gris, es decir, a medio construir.
Instantes después ocurrió todo: hubo decenas de disparos que alertaron a los vecinos, todo esto seguido de gritos desesperados de auxilio.
Los cuerpos médicos no demoraron en llegar, pero ya no había nada que hacer, 7 hombres y una mujer yacían sin vida en la sala, vecinos identificaron casi de inmediato a dos de ellos, uno de nombre Luis y a la mujer a quien le apodaban 'La Flaquita'.