Francia – La Franja de Gaza vivió ayer otro viernes sangriento, debido a los violentos enfrentamientos registrados en la zona fronteriza entre palestinos y militares israelíes, que provocaron seis muertos y 112 heridos.
Por lo menos uno de los heridos se encuentra en situación crítica y otros cinco en grave estado, según el portavoz del Ministerio de Salud en Gaza, Ashraf al Qedra.
En represalia por los disturbios, el ministro de Defensa israelí, Avigdor Liberman, ordenó suspender el ingreso de camiones de gasolina a ese enclave de 365 km2, poblado por 2 millones de habitantes que se encuentran al borde de la asfixia.
Varios camiones cargados de combustible enviado por el emirato de Qatar ingresaron a Gaza en los últimos días para alimentar la única central eléctrica que aun funciona en ese territorio, explicó el ministerio de Defensa. El sábado pasado, luego de las violentas protestas junto a la valla de seguridad con Israel, Liberman había ordenado la reducción de la zona de pesca de Gaza a 6 millas náuticas y advirtió que se tomarían medidas adicionales si continuaba la violencia.
El último incidente de graves proporciones, el 28 de septiembre, había dejado un saldo de seis palestinos muertos y 506 heridos.
Los enfrentamientos de ayer en la zona central de la franja estallaron durante la 29a jornada de protestas en el marco de la Gran Marcha del Retorno, en las que participaron unos 14.000 palestinos, según cálculos del periódico israelí Haaretz.
Las fuerzas israelíes denunciaron que los manifestantes arrojaron piedras, granadas, artefactos explosivos y bombas incendiarias contra los soldados, quemaron neumáticos y enviaron globos aéreos incendiarios hacia las poblaciones del sur de Israel contiguas a Gaza.
En forma paralela, algunos manifestantes treparon a la valla de seguridad en el sur del territorio e hicieron detonar un explosivo que provocó un incendio, informó el mismo comunicado. Un grupo, que al parecer proyectaba atacar un puesto de snipers (tiradores de élite) de las fuerza israelíes, “cruzó la frontera de seguridad y entró en Israel. Como respuesta, las tropas del ejército dispararon contra ellos. Los asaltantes murieron", agregó.
El comunicado militar asegura que, en todos los casos, "las fuerzas israelíes respondieron con medios masivos de dispersión según el protocolo estándar".
Desde el 30 de marzo pasado, en que comenzaron las demostraciones semanales en la línea divisoria entre Israel y Gaza, los grupos palestinos movilizan a la población para protestar contra casi 12 años de bloqueo israelí. Gaza está totalmente aislada por cielo, mar y tierra desde 2007, cuando el movimiento islamista Hamás tomó el gobierno por la fuerza.
Las demostraciones de protesta también reclaman por el Retorno a las tierras que perdieron los palestinos obligados al exilio después de la creación del Estado de Israel en 1948.
En estos seis meses, los palestinos contabilizaron 195 muertos por disparos de las fuerzas israelíes y varios miles de heridos. Israel, por su parte, admitió la muerte de un soldado que fue alcanzado por fuego palestino. También hubo una docena de combatientes radicales muertos por bombardeos israelíes contra objetivos islamistas.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, aconsejó a Hamas no correr el riesgo de “testarnos”. Poco antes las fuerzas israelíes habían destruido un túnel que partía desde la ciudad de Khan Yunes, en el sur de Gaza, y salía a 200 metros del otro lado de la valla de protección. Se trata del 15° túnel destruido por Israel desde octubre de 2017, según los militares.
Netanyahu afirmó que Israel realiza periódicamente ese tipo de descubrimientos y que, en esis casos, “elimina sistemáticamente” esas construcciones subterráneas.
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