Estados Unidos va a incrementar la presión financiera sobre Irán con las "sanciones más fuertes de la historia", tras la retirada de Washington del acuerdo nuclear de 2015 con Teherán, anunció este lunes el secretario de Estado Mike Pompeo.
"Aplicaremos una presión financiera sin precedentes sobre el régimen iraní", dijo Pompeo, agregando que Teherán "no volverá a tener carta banca para dominar Oriente Medio".
El secretario de Estado también destacó la nueva estrategia estadounidense de cara al régimen islámico, que incluye 12 duras condiciones de Washington para cualquier "nuevo acuerdo" nuclear.
Después de retirarse del acuerdo, Washington intenta pasar la página proponiendo construir una "coalición" contra "todas las amenazas" planteadas por Irán, pero corre el riesgo de enfrentarse a los europeos decididos a salvar el texto de 2015.
Irán afirmó el sábado que esperaba medidas concretas de los países europeos para decidir si el acuerdo nuclearpuede ser salvado, en el primer día de una visita a Teherán del comisario europeo de Energía, Miguel Arias Cañete.
Cañete es el primer funcionario de alto rango occidental en ser recibido en Teherán desde la decisión de Estados Unidos de retirarse
Trump considera que el acuerdo alcanzado por las principales potencias (Estados Unidos, Rusia, China, Francia, Alemania y Gran Bretaña) con Irán es muy débil en materia nuclear. También opina que no aborda el tema de los misiles balísticos de Teherán ni sus intervenciones directas o indirectas en varios conflictos regionales, como Yemen y Siria.