León, Gto.- Con un mensaje de amor, paz mundial y buenos deseos a la humanidad, Santa Claus realizó su primer vuelo en su trineo en el Parque Guanajuato Bicentenario.
➡ Suscríbete a nuestra edición digital
Familias completas acudieron a la casita de Santa en la que Lydia Eloísa Cobián Solano, una cuenta cuento hizo bailar, cantar y además relató historia con mensajes de respeto, empatía, esperanza, compañerismo, cuidado a la naturaleza y unión entre las personas.
Todos los asistentes en un ambiente de fe se contagiaron por la magia de la navidad, Santa Claus o Papá Noel por fin se dejó ver en su trineo acompañado de sus renos, entre las luces de navidad que adornaba su vehículo se podría apreciar su traje en color rojo y resaltaba su blanca cabellera, barba y bigote que lo hace ver tan especial.
Para poder realizar este gran sueño, trabajaron alrededor de 12 personas durante dos semanas para trazar la ruta que Santa Claus haría para llegar a los niños, adolescentes y adultos guanajuatenses.
Arturo Fernández, director operativo platicó que llegaron de una empresa instalada en Puebla al Parque Guanajuato Bicentenario, el vuelo de santa viene una idea de Europa en México esta es la tercera vez que se realiza.
Cabe mencionar que la primera vez que voló Santa fue en el estado de Tlaxcala, la segunda en Puebla y la tercera en Silao.
El viaje de Santa inició después de las ocho de la noche, pero se volverá a ver en el cielo del Bicentenario los días 16, 22, 23 y 25 de diciembre; los niños aprovecharon este increíble momento para llevarle su carita una vez que bajó de su trineo.
También conocido como Papá Noel, cuenta la historia que Nicolás de Bari, que luego se convertiría en San Nicolás, nació en el siglo IV en Patara, quien destacó por su bondad y generosidad con los más pobres.
Siendo todavía muy joven, Nicolás perdió a sus padres, víctimas de una epidemia de peste, y se convirtió en el heredero de una gran fortuna. Fue a sus 19 años que decidió dar toda su riqueza a los más necesitados para dedicarse al sacerdocio.
Además, fue nombrado obispo y se convirtió en santo patrón de Turquía, Grecia y Rusia. Además fue nombrado Patrono de los marineros.
San Nicolás falleció el 6 de diciembre del año 345, por tal motivo se decidió que este santo era la figura perfecta para repartir regalos y golosinas a los niños el Día de Navidad.