Incierto es el inicio y operación de las dos universidades para el Bienestar Benito Juárez García en Guanajuato, pues en ningún momento se consideró a las autoridades estatales que se ofrecieron en brindar apoyo; además de que las carreras habilitadas no atienden las necesidades que presenta la entidad.

“No vemos todavía certidumbre por ejemplo en el terreno, no vemos certidumbre ni conocemos que proyecto de construcción van hacer y además me genera mucha incertidumbre que le asignen 10 millones de pesos a una universidad para su nacimiento, para su construcción y para operación, no es creíble”, señaló Eusebio Vega Pérez, secretario de Innovación, Ciencia y Educación Superior.

Agregó que la federación no tomó en cuenta al estado, cuando este mostró su disponibilidad en coadyuvar para el inicio de operaciones de las universidades, buscando que los alumnos tengan garantizada la prestación del servicio, con profesores que tengan el perfil adecuado y los servicios básicos como transporte, seguridad, internet, entre otros.

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“Lo tengo que decir y no por hacer un señalamiento o un reclamo porque en realidad no lo es, yo atendiendo las indicaciones del gobernador y porque creo que como autoridad educativa estatal es mi obligación ofrecer el apoyo, las facilidades, todo aquello que sume para que estos proyectos nazcan fuertes y realmente contribuyan a sus objetivos, a sus propósitos; a nosotros nos interesa mucho que más jóvenes ingresen a la educación superior, pero nos interesa que ingresen a carreras pertinentes para que posteriormente tengan más oportunidades de insertarse al empleo, que estos jóvenes estudien en espacios dignos, seguros, confortables como lo hace la mayoría de nuestros estudiantes en el estado”.

La universidad instalada en Cuerámaro ofertará la carrera de Medicina y Zootecnia, mientras que la de San Diego de la Unión ofrecerá la de Ingeniería en Procesos Agroalimentarios, las cuales no se adaptan a los requerimientos que tiene la entidad actualmente.

“Ellos tomaron otra decisión de irse por su lado, es muy respetable también, creemos que estos proyectos en San Diego y en Cuerámaro pudieron haber nacido en mejores condiciones, pudimos haber trabajado en equipo, unido esfuerzos, recursos, talentos y estar trabajando en un lugar más digno”.