San Francisco del Rincón, Gto.- Habitantes de las comunidades cercanas a las instalaciones de la Química Central, serán sometidos a pruebas médicas y epidemiológicas para detectar afectaciones por los residuos de la empresa que fue clausurada el 4 de abril de 2014 y que fue acreedora de una multa de $33 millones 396 mil 247.57 pesos.
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La aplicación de estas pruebas, fue vista en la Sesión de Ayuntamiento realizada en el cabildo francorrinconense a raíz de un exhorto que envió el Congreso del Estado y se realizarán en coordinación con las autoridades estatales y la Secretaría de Salud.
No hay fecha para la aplicación
La regidora de ese municipio, Montserrat Serna, explicó que las pruebas se van a realizar para ver si hay afectaciones en la salud de los ciudadanos pero por ahora no tienen una fecha para iniciar a realizar los estudios.
“Por parte congreso recibimos una circular donde se hace un exhorto a la secretaría de Salud y al ayuntamiento y nos ponemos a disposición para coadyuvar en dicho exhorto no solo para las pruebas a los ciudadanos que habitan en los alrededores de la química, sino también como municipio tratar de remediar la zona afectada pesar de que la autoridad competente es la Federal no podemos ser omisos ni indolentes ante la situación que están viviendo nuestros ciudadanos”, explicó la regidora.
Contexto
Tras la clausura de la Química Central de México, ubicada sobre la carretera San Francisco del Rincón-León, la empresa fue desmantelada, vandalizada y saqueada. El lugar es conocido “Chernóbil de Guanajuato”, se dedicaba a la fabricación de productos químicos básicos (sulfato básico de cromo, líquido y sólido y dicromato de sodio), principalmente para el sector cuero-calzado y para la agricultura, esto de acuerdo a un ex empleado de Química Central por diversas irregularidades, entre ellas almacenar residuos peligrosos a cielo abierto sin las condiciones de seguridad que establece la Ley General para la Prevención y Gestión Integral de los Residuos (LGPGIR), fue clausurada hace más de ocho años, pero en el lugar fue dejada una montaña de 196 mil toneladas de cromo.
Esta contaminación ambiental, ha provocado daños en la salud de los habitantes de las comunidades Puerta del Cerro, Buenavista, La Venta, El Nacimiento, La Mora, San Roque del Monte, Puerta de San Germán, La Estancia y el Ramillete. Los ciudadanos padecen de enfermedades respiratorias ya que aseguran que se desprenden malos olores, sin mencionar que ya sufren estragos como cáncer, caída de cabello y salpullido en la piel.