León, Gto.- “En el 2022 Guanajuato fue el segundo Estado con más feminicidios en México”
“Más 251 mujeres han sido asesinadas en Guanajuato en lo que va del 2023”
Unidas en un sólo grito “No estamos solas, nos falta Nadia” las alumnas de la Universidad Iberoamericana León crearon una ofrenda de día de muertos dedicada a todas las mujeres que han sido asesinadas en el país.
Las estudiantes, presentaron la ofrenda impartiendo un discurso dedicado al feminismo.
“Les presentamos la ofrenda que hemos elaborado en honor a todas las mujeres que han sufrido injusticias en el estado de Guanajuato. A lo largo de los años, el feminismo ha ganado relevancia en varios contextos, a menudo malentendido, ya que existe una idea errónea sobre él.
El feminismo no se trata de odiar a los hombres ni de buscar la superioridad de las mujeres sobre los hombres, ni tampoco es el opuesto al amor. El feminismo es una lucha que ha perdurado a lo largo de los años, buscando que las mujeres tengan los mismos derechos, y se ha logrado gracias a las feministas que han existido a lo largo de la historia.
Hoy en día, las mujeres pueden votar, estudiar, leer cualquier libro, trabajar, usar faldas por encima de la rodilla y muchas otras cosas, y tal vez nunca te hayas detenido a pensar que todo esto se logró gracias a movimientos feministas y a mujeres valientes que decidieron alzar la voz contra lo que no estaban dispuestas a aceptar.
Hoy en día se escucha más sobre el feminismo porque, efectivamente, está en boga, y ¿Qué mejor momento para luchar por nuestros derechos cuando cada día mueren 10 mujeres víctimas de feminicidios en México? Ser feminista no se limita a alzar la voz y protestar por aquellas que ya no pueden hacerlo, ni a ponerte un moño violeta el 8 de marzo. Ser feminista también significa no juzgar los cuerpos de otras mujeres, apoyarnos entre nosotras y resistir las críticas, incluso las que provienen de nosotras mismas. Ser feminista es apoyarnos y respetarnos mutuamente a diario.
Sé que hay mujeres que no se consideran feministas y, en su lugar, se llaman machistas. Permíteme aclararte un dato importante que debes comprender: una mujer no puede ser machista solo por ser mujer, de la misma manera en que un hombre no puede ser feminista solo por ser hombre. Pero puedes apoyar la ideología que más te resuene. Quiero que sepas que todas nosotras alzaremos la voz en tu nombre para seguir defendiendo nuestros derechos.
Es cierto que muchas mujeres sienten que el feminismo no las representa, pero debes saber que gracias al feminismo hoy tienes la libertad de expresar tu opinión. Dios no creó a la mujer para que fuera superior ni para que fuera pisoteada por el hombre; la creó para ser amada, igual y respetada. Juntas, continuaremos luchando por un mundo en el que todas las mujeres puedan vivir sin temor, con igualdad y justicia.”
Además, se recordó a Nadia, narrando a los asistentes un poco de su historia.
"Hoy nos reunimos para recordar a un joven estudiante que se convirtió en víctima de la violencia de género y, trágicamente, la perdimos, uniéndose a las desgarradoras estadísticas de nuestro estado de Guanajuato. A través de testimonios y detalles impactantes, intentaremos comprender el contexto y las consecuencias de su trágica partida. Prepárense para un relato lleno de emociones y reflexiones sobre la violencia de género.
Era un domingo por la tarde, alrededor de las 6 pm, cuando Blanquita manejaba su camioneta y pasó junto al automóvil de Nadia, quien iba acompañada de una amiga. Aquel breve encuentro sería el último saludo que madre e hija que intercambiarían. Blanca Marina Martínez Trejo, madre de Nadie, recuerda ese momento con un nudo en la garganta.
"Le mandé un mensaje y le dije, 'te vi, Nadia'", me respondió, 'sí, yo te vi, mami'. Ese fue el último intercambio de palabras que tuve con ella.
Aquella noche, el reloj en la habitación de Blanquita marcaba la 1:38 am cuando sonó su celular. Era Carlos Pérez Zeledón, entonces novio de Nadia. “Señora, venía hablando con su hija por teléfono y de repente se escucharon los disparos. Quería comunicarme con ella, pero no recibía respuesta”. Alarmados, Blanquita y su esposo se subieron a su camioneta y se dirigieron a la carretera cerca de la colonia Del Prado, donde habían visto el automóvil de Nadia estacionado. Lamentablemente, sus temores se hicieron realidad.
Bernardo comenzó a llorar y yo me hallé allí, en medio de la tragedia. Pensaba que estaba ante un accidente de tráfico y que Nadia estaba con vida. Toqué a mi hija y estaba tibia. Le dije a mi esposo, 'tócala, está tibia'. Él se resistía a hacerlo, y las personas no nos dejaban acercarnos más a ella. En medio de la desesperación y el shock, Blanquita sentía gratitud hacia Dios por haberle dado la oportunidad de ser madre y por los momentos compartidos de risas y abrazos. Su corazón estaba lleno de dolor, y su mente se llenaba de preguntas sin respuestas.
Dos días antes de su trágico fallecimiento, Nadia había publicado en sus redes sociales un mensaje impactante, simulando ser víctima de la violencia como parte de una campaña para crear conciencia sobre la situación que viven las mujeres en nuestro país. Sus palabras resonaron en nuestros corazones: 'Mami, papi y hermano, si algún día soy yo, recuérdenme por la mejor versión de mí. No soy un cuerpo tirado y lastimado, mi ser no vive en la foto que pasa por los medios de comunicación, creando amor. Y mucho menos hagan caso a los comentarios machistas que hablarán de mí en las redes sociales'.
Aquellas palabras se convirtieron en un triste presagio del destino de Nadia. La violencia de género le arrebató la vida y dejó a su familia y amigos sumidos en el dolor y la impotencia. A las 2:27 am de esa madrugada, el sistema de emergencias reportó el hallazgo de una mujer sin vida en un vehículo con múltiples impactos de bala en el camino hacia la Comunidad de La Ordeña. Posteriormente, la familia confirmó la devastadora noticia en redes sociales.
Hoy es 2 de noviembre, y recordamos con tristeza a Nadia, quien no se fue, nos la quitaron. Como muchos otros mexicanos, decoramos con papel picado el altar de una persona que le dio color a nuestras vidas, colgamos fotos de una sonrisa que no nos cansamos de recordar. Hoy celebramos lo que fue su vida y lo que ella significó en la nuestra."