León, Gto.- Gabriela Echeverría, regidora de Morena en el Ayuntamiento de León, declaró que el Ayuntamiento aún tiene una deuda pendiente con la población infantil en materia de seguridad, salud y educación.
Lo anterior comentó al conformarse con autorización del Ayuntamiento, la Procuraduría Auxiliar (Municipal) de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes.
“Seguimos teniendo una deuda pendiente e histórica con los niños de León, pero se está trabajando, se está avanzando y una muestra es contar con este consejo. Es un acierto separar la procuraduría del DIF municipal, considerado punta de lanza a nivel nacional, ya que León es el único municipio que da el paso y será obligatorio para el resto de los municipios en Guanajuato”, dijo.
Comentó que durante la campaña electoral pasada, como candidata de Morena a diputada local, pudo observar las necesidades de los menores de edad en las colonias más alejadas.
“Hay mucho que hacer, ahora que estuvimos en campaña vimos la realidad de los niños, las necesidades que tiene la población infantil y todo el trabajo que se tiene que hacer para ayudarlos, pero como presidenta de la Comisión para la Protección de Niñas, Niños y Adolescentes, estoy comprometida a seguir con este trabajo”, enfatizó.
Reiteró que el problema que más padecen los menores de edad es la inseguridad que existe en la ciudad y que también sus padres la sufren, y otro problema es la desigualdad social.
“Esta se ve en la educación y las condiciones en las que van a clases, vemos que en las escuelas primarias de ciertas colonias de la periferia están deshabitadas, no tienen condiciones los baños para ser utilizados por los estudiantes, lo mismo pasa en los salones de clases, en donde los maestros están saturados porque los grupos son mayores a 30 niños, y esto hace imposible el control para un solo maestro. En el problema de salud y educación tenemos un rezago importante y un pendiente con los pequeños”, dijo.
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Explicó que deben de existir más políticas públicas por parte del municipio y del Estado enfocadas en atender las necesidades de los menores de edad para ofrecerles una mejor calidad de vida en las escuelas.
“Es un riesgo en materia de salud que los baños no tengan agua y mucho menos jabón y papel, los maestros sufren para que los padres de familia aporten un poco. Por eso el llamado al municipio es para que tome cartas en el asunto y que las autoridades trabajen en beneficio de esta población con quienes se tiene una deuda”, concluyó.