Guillermo Romero Pacheco, analista financiero y quien fuera secretario de Desarrollo Económico de Guanajuato, afirmó respecto a la que llamó “contrarreforma energética” que es seguro que las empresas generadoras se vayan a litigio ya que con las nuevas disposiciones, la CFE las irá dejando al final de la fila para comprarles y pronosticó que “tardará años” en que estos juicios se resuelva.
Romero Pacheco señaló que a reserva de conocer los convenios que la comisión federal de Electricidad tiene con cada una de las compañías, al desplazarlas, las puede llevar a la quiebra.
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La entrada en vigor de la Reforma Energética este miércoles, significa que las plantas de la CFE se benefician en el despacho de energía, por encima de las centrales solares, eólica o de ciclo combinado, todas de la iniciativa privada.
De entrada, Guillermo Romero afirma que “esta contrarreforma, porque no es una reforma, está basada en motivos ideológicos y no de costo-beneficio, lo que ocasionará consecuencias”.
Aseguró que “habrá litigios de las empresas que están invirtiendo en generación de energía eléctrica de diferentes formas, ya sea eólica, solar e incluso plantas de ciclo combinado que funcionan con agua y gas natural, porque se van a ver desplazadas y los expertos consideran que esto viola la parte constitucional”.
A TRIBUNALES
Sobre el panorama legal a partir de las nuevas disposiciones, expresó que “las empresas que han invertido en energía eléctrica, digamos una empresa como Iberdrola, que genera energía eólica en San Luis de Paz, en Guanajuato, con esta nueva reforma a lo mejor ya no le va a comprar CFE y se va a ir a un tribunal porque considera que se está violando la Constitución”.
“Las plantas de ciclo combinado son las que seguramente van a demandar, unas lo harán directamente por lo que ellas firmaron convenios con Comisión Federal de Electricidad y con el gobierno mexicano y otras actuarán posiblemente diferente ya que están reguladas por artículos y reglamentos que tiene el T-MEC”, agregó.
Romero Pacheco explicó que las primeras adecuaciones al T-MEC que realizó el ahora presidente Joe Biden “fue tratar de regresar al Tratado con una visión al 2030, que es prácticamente la utilización de energías limpias o por lo menos, un porcentaje muy alto para que cada empresa las utilice y esta reforma va en contra totalmente”.
“Esto se va a contraponer aún más porque en Estados Unidos habrá un auge de energía limpia y hacia la transformación de los autos eléctricos, bueno va a ser muy completo el programa de medioambiente y con esto, en México habrá demandas y litigios más adelante”.
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“Hay empresas de Estados Unidos y de Canadá, eso lo sabe el gobierno mexicano y es que la parte económica es delicada”.
Quien ahora es presidente ejecutivo de la Asociación de Proveedores de México, (Apimex), afirmó que “la contrarreforma significa que ahora, aunque tengas un buen precio te van a mandar a la fila para comparar y eso va a generar demandas”
Respecto al tiempo que durarían los juicios, expresó que se “llevarán años; son litigios largos. Ese es el escenario, si no pasa otra cosa. Solo es cosa que una empresa demande para que vengan las demás”, advirtió.
Mientras los recursos legales están en proceso, las empresas pueden operar, pero quizás no de manera normal. “A las que CFE les compre menos van a tener que producir menos y entonces se verán afectadas”.
Por Ley, esas compañías a las que CFE compre menos o no compre energía, no pueden comercializar con particulares, “necesariamente toda energía debe pasar a través de CFE, que es el órgano que la controla. Si antes controlaba 50-50, ahora con esta reforma absurda, CFE va a tener que generar más, pero sus plantas contaminan”.
Y hay otro punto que el analista prevé. “CFE puede privilegiar comprar más caro. Con el control que tendrá las consecuencias es que podría haber plantas que cierren… es un escenario muy complejo”.
Las ventas de esta energía a CFE ¿están contratadas por tiempo, por costo o por volumen?
“Lo desconozco; es un tema de cada contrato por empresa, podría ser por licitación o por asignación. Seguramente los institutos de transparencia lo podrían informar”.
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En Guanajuato hay dos plantas de ciclo combinado de inversión privada, una planta de energía solar en el norte del estado, de una empresa italiana, “muy grande, impresionante” y la última es de la empresa Iberdrola.
Guillermo Romero Pacheco recordó que el tema de la generación de energía surgió en el sexenio de Ernesto Zedillo (1994-2000), con la idea de autoconsumo y la que sobrara se podía vender a la CFE. “Esa estructura no atentaba la propiedad y te la podía pagar. El problema se resolvía sin tener que modificar la constitución.
Es con Enrique Peña Nieto, en 2013 que se retoma la Reforma y entonces se establece que “cuando tienes un contrato o convenio, tienes el derecho de demandar; de hecho se conocen algunas sentencias en donde han ganado particulares”.
ANTES DE REFORMA, COSTO-BENEFICIO
La generación de energía eléctrica en México se hace, una parte con plantas que tiene CFE y otra por la iniciativa privada. “En Guanajuato son muy importantes las plantas de ciclo combinado que son privadas o de conversión y las de energía eólica y solar, en el área de compra y distribución de la CFE, que comprar para venderla”.
“El criterio hasta antes de esta contrarreforma era comprar lo que esté en el mejor precio pensando en costo-beneficio y si tu energía está a mejor precio que una planta de energía de la misma CFE, ésta le compraba para venderla al ciudadano ya sea de uso residencial o industrial”.
Agregó que “el beneficio en el costo para la misma CFE se puede comprobar con el balance de resultados; esta es la única área de Comisión que estaba ganando dinero con la transmisión y distribución de energía que compraba; pero ahora, con esta contrarreforma te dice ´tú tienes que comprarme primero antes que nadie, a todas las plantas de la Comisión hasta agotar, sin importar si es más cara o contamina”
El ejemplo, la planta de Salamanca, Guanajuato “que funciona con combustóleo y es la principal fuente de contaminación en la ciudad”.
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LAS OTRAS CONSECUENCIAS
El panorama que Guillermo Romero prevé es que “la energía eléctrica las vas a comprar más cara y si el presidente o la Secretaría de Energía están diciendo que no van a subir los precios, no va a ver de otra más que la subsidien; es decir, utilizará el dinero de los impuestos.. coloquialmente, vas a tapar un hoyo con otros y entonces dejará de construir un hospital, una carretera, tener más vacunas o cualquier otra cosa que te dé mayor beneficio”.
Sobre cómo afecta a los industriales, indicó que “la cuestión es de costos y la consistencia o la seguridad que es muy importante para cualquier inversión; la otra es más grave, ya que todas aquellas empresas o grupos que están invirtieron o invirtieron en energías limpias, aunque aparentemente van a seguir vendiendo, con esta contrarreforma los ponen ´en la cola´”.
El tercer punto es que “están cambiando las reglas y cuando cambias las reglas de inversión, creas mucha desconfianza. La afectación va a venir por ahí; va a suceder un poco como lo que pasó con el gas; ya lo vivimos hace un mes con los apagones porque estas plantas de gas y agua (de ciclo combinado) son de las mejores pero por haber dejado más de 128 bloques de gas natural que podrían haber llevado a la cuenca de Burgos que colinda con Texas y Tamaulipas, México dejó de tener gas natural, que es muy importante para la generación de luz”.
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