Listo Guanajuato para el Censo Nacional de Población

Esfuerzo titánico

Luis Hernández | El Sol de León

  · domingo 19 de enero de 2020

Foto: Francisco Carmona | El Sol de León

Más de 70 mil manzanas en todo el estado serán cubiertas por un “ejército” de prácticamente 10 mil entrevistadores que serán los encargados de levantar el Censo Nacional de Población y Vivienda 2020 en todo el territorio guanajuatense.

A sólo semanas de que se realice una edición más de este proyecto de participación ciudadana de carácter obligatorio, del 2 al 27 de marzo, el coordinador estatal del Instituto Nacional de Estadística y Geografía, Jorge Humberto Dueñas Acuña, aseguró que ya cuentan los días para arrancar con el ejercicio estadístico de la década.

Una de las particularidades es que este será un censo que hará historia al entregar resultados en tan sólo 8 meses. En 2010, se requirió de un año de trabajos para poder darlos a conocer.

Intensa planeación

Un trabajo de esta magnitud y alcance no puede lograrse de la noche a la mañana, según explicó Dueñas Acuña, los preparativos toman prácticamente un año.

“El Censo se tiene que estar planeando desde un año antes porque implica una logística muy detallada para poder cubrir cada manzana y cada localidad en el país, entonces vamos haciendo planeaciones muy detalladas”, dijo.

La información que se obtiene resulta interés para diversas entidades de gobierno para ubicar población de interés, planificación de proyectos y programas de política pública, desarrollo social, análisis de pobreza, proyecciones de población.

Pero también puede ser de vital importancia para la iniciativa privada pues puede tener datos para nuevos estudios de mercado.

Un censo de alcance general

Cada rincón del país debe de ser contabilizado, por ello los trabajos de colaboración entre el INEGI y todas las autoridades son importantes.

“Tenemos mucha participación de los municipios, en este momento nosotros ya platicamos con todos los municipios, ya hicimos reuniones para ver la logística del censo y cómo puede apoyar el municipio para el desarrollo del mismo”, dijo.

De igual manera, para llegar a comunidades rurales ya se han acercado a delegados y comisariados ejidales; “inclusive ya hemos establecido contacto con líderes morales, ya también estamos en ese trabajo de construcción de las redes que nos van a apoyar a sustentar el censo a nivel autoridad local”.

Capacitación, clave para el entrevistador

Dado que no es un trabajo sencillo, los miles de entrevistadores que son contratados para este esfuerzo reciben varias semanas de cursos de capacitación para poder ser capaces de aplicar los cuestionarios al pie de la letra.

Tan sólo en Guanajuato se contratarán 8 mil 900 personas de las cuales 6 mil 700 son censores. En un momento dado se suman mil supervisores para totalizar alrededor de 10 mil personas contratadas para ejecutar el censo en la entidad.

El antes y el después de la tecnología

Con la llegada y aplicación de nuevas tecnologías, cada década se ha ido aminorando la carga de trabajo; Dueñas Acuña recordó lo compleja que resultó ser la recopilación y captura de los datos en los 90’s.

“Por ejemplo el censo de población de 1990 todavía fue de los que se capturaron, en los 90’s todavía estábamos en los inicios de la informática, se capturó en las 10 direcciones regionales, porque adquirir un equipo de cómputo con la capacidad de capturar cada vivienda era muy difícil, eran equipos de cómputo que ocupaban una habitación”, dijo.

Ya a partir del 2010, las tabletas electrónicas jugaron un papel importante que se sigue realizando en la actualidad.

“Este censo va a incrementar su captura en el momento del levantamiento a través de tabletas, y obviamente donde no se pueda trabajar con ellas, vamos a seguir levantando a papel pero ya es mínima la cantidad de capturas que se harán a nivel estatal”, dijo.

“Hemos incorporado ya también la cartografía a las tabletas, y los mismos entrevistadores van seleccionando sus manzanas y eso nos ayuda bastante con la integración”, añadió.

Este censo también será el primero en el que se puede responder vía telefónica o bien a través de una página web gracias a un código QR que puede ser leído desde cualquier teléfono, únicamente sí la persona se niega por tercera ocasión a recibir al entrevistado.

Las mismas ventajas tecnológicas servirán para que por primera vez en la historia sólo se requieran de 8 meses para presentar los resultados oficiales del Censo de este 2020.

“Antes un censo podía tomar dos años para que se dieran a conocer sus resultados, ahora ya no, en este censo de 2020 queremos romper el récord y queremos presentar, obviamente con ayuda de la tecnología, resultados en noviembre de este año. En 2010 tardamos un año, vamos acortando los plazos”, aseguró.

Protegen a todos

Ante el escenario de inseguridad que azota a Guanajuato, Jorge Humberto Dueñas Acuña explicó que ya se tienen los protocolos de seguridad para proteger la integridad, tanto de los entrevistadores como de los entrevistados.

En el primer sentido destacó la coordinación con las autoridades de cada municipio y de cada comunidad para poder ser protegidos durante las visitas a cada hogar guanajuatense; de igual manera es importante que la ciudadanía conozca los detalles que debe presentar el censor para poder ser plenamente identificado.

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Fotos: Édgar Camacho | El Sol de León

De hecho, al reverso del gafete, cada entrevistador porta un folio que puede ser consultado vía telefónica a un número gratuito para recibir la confirmación de que se trata de un colaborador de este macroejercicio estadístico y social de nuestro país.

También es preciso destacar que durante los cuestionarios no se solicita información de carácter personal como tarjetas, contraseñas o datos privados.

Podría haber sanciones

De cara a la posibilidad de que más de un ciudadano no colabore con este censo, existe una sanción, incluida en la Ley de Información Estadística y Geografía que puede aplicarse, sin embargo el INEGI confía más en la concertación y la sensibilización para que la ciudadanía se sume de la mejor manera posible.

“Preferimos mejor abocar a la buena fe de todos los informantes para concertar y levantar el cuestionario porque es un proyecto cívico, es un proyecto de sensibilidad social”, concluyó.