Lagos de Moreno, Jal.- Todo parece normal. Es un día cualquiera, vehículos van y vienen y personas caminan por sus calles. Los negocios permanecen abiertos al servicio de los clientes, no hay una sola unidad policíaca patrullando la ciudad. Pero se respira tensión, miedo, incertidumbre y desesperación. En Lagos de Moreno, faltan cinco.
➡ Suscríbete a nuestra edición digital
La noticia sacudió desde el fin de semana pasado, a este pequeño pueblo mágico ubicado en los límites con Guanajuato. Cinco muchachos fueron a la Feria y no se supo de ellos. Varias versiones envuelven el caso, se dicen muchas cosas, pero las familias, silenciosos y desesperados gritos de dolor piden que aparezcan, "como sea".
La noticia se volvió más cruda cuando en redes sociales se difundió un video, cuyo contenido es difícil de explicar. Lagos de Moreno, se puso en los ojos del mundo y mientras las autoridades hacen lo propio, la ciudad es otra.
"Todos queremos saber, pero nadie se atreve a preguntar"
Su esencia cambió. "No son mis familiares, pero pudo ser uno de nosotros, uno de nuestros hijos, nietos hermanos o sobrinos. Nadie se imagina esto, las formas en que todo ocurrió, nos duele, nos llega". Comentó Clara Armenta, desde su pequeña tienda de abarrotes. La señora de 62 años, dice: "todos queremos saber, pero nadie se atreve a preguntar, no comprendemos el dolor porque no lo vivimos en carne propia pero lo sentimos, imaginamos la desesperación de ellos por no saber de sus niños". Contó.
Te puede interesar: Marcha silenciosa en Lagos de Moreno por jóvenes desaparecidos
Y es que las familias de Uriel, Dante, Roberto, Diego y Jaime, están cansadas y quieren paz. Ya se encuentran agotados física, pero sobre todo emocional y mentalmente. El pueblo laguense en muestra de empatía no pregunta. Se unen en oración para que aparezcan. "Es lo único que podemos hacer". Dice la señora Clara.
En estado de alerta
Y en medio de la cotidianidad, hay miedo. La gente está alerta. Haciendo sus actividades se percatan de la presencia de un vehículo extraño o personas ajenas al municipio y voltean a ver repentinamente, como asustados, angustiados. De lejos, en la Plaza Principal observan el trabajo de las decenas de reporteros y medios de comunicación qué llegan al lugar, para dar cuenta de los hechos.
Te puede interesar: Con mucha fe, peregrinan a San Juan de los Lagos
Miradas tristes, rostros apagados y pocas ganas de conversar distinguen a la mayoría. "No hay palabras, es aterrador, fue un acto qué ni siquiera podemos pronunciar. No lo merecían". Cuenta Gregorio, un señor de 72 años que, a diario, acude a sentarse a la Plaza Principal, frente a la parroquia de la Asunción para platicar con sus contemporáneos. "Es algo muy feo y ni siquiera queremos conversar el tema porque creemos que es morboso. Sabemos que la violencia en el país ha crecido, pero no pensamos que aquí nos fuera a tocar así". plática.
La vida en este pueblo cambió. Es un lugar tranquilo, colindante con carreteras inseguras y es paso a otros municipios en donde la violencia está en su apogeo.
No hay vida en Lagos
" Ellos desaparecieron el viernes. El sábado y el domingo todavía hubo algo de gente, pero desde el lunes para acá desde las siete de la tarde se queda sólo. Las tiendas del centro cierran más temprano y únicamente se ve pasar a la gente que sale de trabajar y va a sus casas. Son vacaciones y todas las tardes estaba lleno, de niños jugando en el kiosko, de familias completas. Las ventas se bajaron estos días". Comentó Claudia, encargada de un negocio de helados.
Y mientras Lagos de Moreno, parece detenido en el tiempo, no hay presencia de autoridades no se ven. Las carreteras para llegar a este municipio carecen de presencia policiaca. Ni Guardia Nacional, Ejército Mexicano o la corporación Municipal, hacen acto de presencia. Únicamente hay agentes de tránsito dando vialidad en los principales cruceros y en la zona Centro. En la comandancia solo una oficial hace guardia.
Encienden veladoras
Este viernes y sábado, como acto de fe, de esperanza, pero también para mostrar empatía a las familias y sin dejar de lado el exigir justicia, cientos de personas se reunieron en las escalinatas de la Parroquia de la Asunción para encender veladoras y unirse en oración para localizar a los jóvenes.
Una bandera de México, cartulinas con poemas dedicados a ellos, velas con la fotografía de los jóvenes y con mensajes escritos deseando su regreso, llenaron el atrio con la frase: "los queremos de vuelta".
Otras desapariciones
Las desapariciones en jóvenes jaliscienses han aumentado en los últimos meses. Para ninguno de ellos, ha llegado la justicia.
En junio pasado, ocho trabajadores de un centro de llamadas en Zapopan desaparecieron y sus cuerpos sin vida fueron localizados días después.
Los hermanos Reynaldo y Arturo González Escalante, quienes se dedicaban a lavar coches, fueron desaparecidos en Colotlán.
Las hermanas Adriana, Rosa y Adriana Saucedo Zermeño desaparecieron en Encarnación de Díaz junto con Beatriz Hernández. No hay pistas de ellas.
EL DATO
-Este sábado 19 de agosto hubo operativo en la zona con la detención de 7 personas y un fallecido. Participaron fuerzas federales, estatales y municipales en Lagos de Moreno.