Hay tres verdades del evangelio de San Lucas: La vocación, la libertad y la tierra prometida. La profesión de fe verdadera, libera de una religión fanática y vacía, de hacer actos sin sentido como en el juego de fútbol en el estadio La Corregidora entre Querétaro y Atlas, donde la gente se peleó, muchos estaban bautizados y tal vez tomaron ceniza, mencionó el Arzobispo de León, Alfonso Cortés Contreras durante la misa dominical.

Dijo que el tiempo de Cuaresma invita a descubrir que la fe debe ser histórica, que ilumina la vida, la escuela y el trabajo, conduce a fortalecer la fe en Cristo muerto y resucitado, ese Cristo pascual que ilumina la existencia, por esa razón esas críticas fuertes a la religión o al catolicismo, porque la verdadera da sentido al mundo.

Mencionó que la semilla de la libertad está plantada en el corazón de todos, pero cuando una persona se casa y el esposo o la esposa no lo (la) hacen más libre eso no es maro. Se tienen muchas esclavitudes, vicios, ideas fijas, sentimientos de rencor, de amargura que permiten la libertad.

No se puede vivir sin amor

Los seres humanos fueron creados para dos cosas, la primera es para amar y la segunda para ser libres “amar no es ese discurso dulzón que hoy se hace del amor, es amarme a mí mismo, a los demás y amar a Dios como se debe. Y el modelo del amor es que dio su vida por nosotros al extremo, tanto amó dios al mundo que nos dio su hijo unigénito nacido de una mujer para salvarnos”, continúo.

Un ser humano no puede vivir sin amar y sin ser amado, el amor humano y el amor de Dios son dos experiencias que deben mezclarse, el amor humano cuando está solo se convierte en vicio y el amor de Dios cuando no está unido al humano se convierte en teoría.

La fe ilumina y encamina el acontecer diario de los seres humanos y su vida completa, por lo que todas las personas están llamadas a tener una vida digna.

Mucha gente confunde con la profesión, la primera representa lo que cada quien tiene como persona, lo que da sentido a la vida por ejemplo ser esposo, hijo, sacerdote o ser soltero, mientras que la segunda es lo que se hace ingeniero, doctor, maestro o carpintero, es un llamado de Dios a realizar una vida digna, a realizarse como persona y ayudar a los demás, es algo que va más allá del dinero, placer o diversión.

Ser profetas o reyes no era por herencia sino por voluntad de Dios, porque cuando tiene un sentido religioso, muchas veces quieren ser padres o madres de familia sin importar Cristo, un papel y sin un sentido de trascendencia.

La tierra es un don

Precisó que el don de la tierra que es uno de los derechos del ser humano es tener un pedacito de tierra donde pisar y dónde poner sus pies.

“La tierra forma parte del ser humano por eso tenemos deseos de tener una pertenencia y por eso es tan importante los derechos que tenemos al trabajo, a tener un techo, a tener un techo y un lugar que nos de comer, por eso amamos donde hemos nacido, donde nos hemos formado como personas”, explicó.

Finalmente dijo que la oración no sólo se expresa con la boca, sino con el corazón y la conciencia, y esa es profesión de fe, así Jesús rechazó las tentaciones porque tenía su corazón en Dios y el Espíritu Santo.