Misteriosas, sanguinarias, violentas, accidentales y hasta posibles crímenes pasionales sin dejar de lado la propia decisión de terminar con su vida, han sido el tipo de muertes que se han registrado en las habitaciones de hoteles y moteles convirtiendo estos espacios de confort y descanso en el escenario de un fallecimiento.
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Los lamentables hechos, han quedado grabados en la memoria de la sociedad y aunque la mayoría son hechos en los que las personas deciden arrebatarse la vida ellos mismos, dejan una estela de misterio y zozobra en sus familiares, quienes no llegan a comprender los motivos para tener el valor y dejar este mundo.
Guadalupe Ramírez, empleada de un prestigioso hotel ubicado en el bulevar Adolfo López Mateos, comenta que después de la tragedia, las habitaciones vuelven a estar a disposición de los huéspedes. A menos que la autoridad impida que se utilice por cuestiones de investigación.
La mujer de 55 años, tiene casi 30 trabajando como camarera y ha visto de todo pero una vez que los cadáveres son sacados del lugar, todo vuelve a la normalidad.
“He visto de todo, hay gente que se quita la vida, que muere por enfermedad o repentinamente de un infarto. En cuanto el personal del hotel se da cuenta, se da aviso a las autoridades, llega el Ministerio público y la Policía. Una vez que se llevan el cuerpo y si no hay otra indicación la habitación se limpia de todo, desde sábanas, pisos, ventanas, todo de desinfecta, se fumiga, se dejan abiertas puertas y ventanas y doce horas después, ya está disponible para otros huéspedes”. Comentó Lupita.
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En la ciudad de León, han ocurrido innumerables casos de hallazgos de personas sin vida en estos establecimientos y continuación, un recuento de los más relevantes.
Policía Municipal mata a su pareja y se quita la vida
En una habitación del motel Piscis en la colonia Monte de Cristo, ubicado en la salida a San Francisco del Rincón, un oficial de la Policía Municipal de León, asesinó a su pareja. Esto ocurrió el 24 de enero de 2016.
La pareja ingresó al lugar a las 02:30 horas de la madrugada y a las 09:30 horas se reportó el hallazgo de ambos cuerpos. El fue encontrado ahorcado, se llamaba Alfredo de 41 años y era conocido en la corporación como “El Payaso Krusty” por su cabello rizado. Ella era Nancy Esmeralda, una psicóloga de 32 años de edad. Ambos tenían tres meses de relación sentimental, murió golpeada por una piedra en el cráneo, misma que fue encontrada a un costado de su cuerpo.
Intoxicados
Los cuerpos sin vida de una pareja, hombre y mujer, fueron localizados en una habitación de un motel de paso en la colonia Paseos del Country. El hallazgo ocurrió a las 3:00 horas de la madrugada de ese 10 de febrero de 2018, en el hotel denominado Love Bling, ubicado en bulevar San Juan Bosco esquina con bulevar Paseos
De acuerdo con lo informado por las autoridades, la pareja arribó al motel el viernes por la tarde y su estancia vencía a la 1:00 horas de la madrugada. Al finalizar el tiempo, empleados del hotel llamaron a la habitación número 21 para pedirles que fuera desocupada, sin embargo, no obtuvieron respuesta, por lo que decidieron ingresar al cuarto. En la cochera localizaron un automóvil Mazda encendido y en la entrada los cuerpos inertes de las dos personas.
“Ellos fueron identificados como Erika y Javier, ella empleada doméstica y él, instructor de deportes, tienen entre 37 y 43 años. Hasta ahorita sus familiares no se han presentado, por lo que esperamos que ellos se presenten para confirmar sus identidades”, explicó Cuauhtémoc Aguilar, vocero de la Fiscalía, en aquel entonces llamada Procuraduría de Justicia.
En el hotel “El Cid”
Este hecho ocurrió el 5 de octubre de 2019. El tener adicciones y ser portador de una enfermedad venérea, tenía a Alejandro sumido en la depresión. Respondía al nombre de Alejandro de 24 años, quien era travesti y se dedicaba a la prostitución. La causa de muerte del joven, fue un traumatismo craneoencefálico.
A las 09:30 horas de la mañana del lunes, Alejandro llegó al Hotel El Cid, ubicado en la esquina del bulevar Adolfo López Mateos y la calle Julián de Obregón, frente al Parque Hidalgo y en los límites de las colonias Obregón e Industrial. Al llegar, solicitó una habitación para hospedarse. Fue a las diez de la mañana, que se escuchó un fuerte golpe, y al salir, los empleados vieron al hombre tirado sobre la banqueta y ya sin signos vitales. Alejandro, se aventó desde la ventana de la habitación que alquiló.
En una casa de citas
Un caso violento, ligado aparentemente al crimen organizado, ocurrió en un hotel y casa de citas ubicado en plena zona centro de la ciudad. A pesar de ser una zona con amplia presencia policiaca debido al corredor de bares y cantinas que opera los fines de semana, los agresores no han sido detenidos a casi dos años de los hechos.
La identidad del hombre no fue revelada. Únicamente se dijo que se encontraba en el interior del lugar ubicado en la calle Pedro Moreno, cuando hombres armados se acercaron a él y le dispararon de manera directa. El lugar es conocido como “Las Nietas de la Abuela”.
La enfermera Diana
En medio de una campaña de búsqueda, angustia y desesperación de su familia. Una joven de 30 años identificada como Diana Elizabeth Ríos Gasca y quien trabajaba como enfermera en una clínica del IMSS, fue localizada sin vida en el baño de la habitación de un hotel de la colonia Bugambilias. Su desaparición y muerte causaron conmoción y dudas en la sociedad, quienes aún no creen que ella haya decidido quitarse la vida. Para su localización se activó el Protocolo Alba.
En otras ocasiones, las víctimas han sido localizadas en las bañeras, en las regaderas e incluso acostadas reposando en la cama, algunos de ellos han dejado cartas póstumas informando los motivos de su decisión y en otras ocasiones hasta pidiendo perdón a sus seres queridos, por la acción realizada.