El diputado federal panista, Éctor Jaime Ramírez Barba, defendió el servicio médico y de consulta que ofrecen las farmacias privadas, ya que aseguró que son necesarios en muchas partes de México y dijo que el gobierno federal no podrá quitarlas del mercado porque todas las personas son libres de ejercer cualquier profesión siempre y cuando cumplan con la ley.
Esto referente a las declaraciones que dio de manera reciente el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud federal, Hugo López-Gatell, donde argumentó que son un “gran engaño” y acusó que su objetivo real es vender medicamentos y no abonar a la salud de los pacientes.
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Ramírez Barba, médico de profesión e integrante de la Comisión de Salud en el Congreso de la Unión, calificó la declaración del funcionario federal como una “barbaridad”, pues al menos durante los últimos años, este sector de la salud ha brindado un servicio positivo a la población porque la mayor parte de los hospitales públicos estaban ocupados atendiendo los casos de la pandemia por el covid-19.
“Él estaba hablando de personas físicas que se dedican a servir la salud y me parece una barbaridad lo que dijo cuando en realidad lo que está haciendo esa gente (…) Queda claro que por más que tú tengas seguridad social a través del IMSS hay municipios donde no existe el IMSS”, dijo.
Defendió el trabajo de los profesionales de la salud, pues dijo, que el gobierno no los podrá quitar del mercado ya que la mayoría cumple con la normatividad que solicita la federación.
“Lo que está hablando López-Gatell es una barbaridad, todos los médicos que tienen un consultorio privado, que están anexo a una farmacia o cerca de un hospital o en una ambulancia son profesionales de la salud”, agregó.
Además criticó el sistema de salud federal porque muchas de las veces no cuentan con los medicamentos necesarios y las citas las dan hasta dentro de ocho meses por lo que el mexicano tiene que ir a buscar la atención a su salud y a la de sus familias.
Remató con que todos los médicos, incluidos los del sector privado, fueron los que le entraron a la pandemia a pesar de la “estrategia criminal” del sector salud federal al dejarlos sin protección, sin vacunación porque no vacunaron a los médicos privados que forman parte de este sistema.