León, Gto.- La Red de Trabajadores de General Motors en América Latina, exige que se respete a los colaboradores de la planta en Silao, debido a que los mismos les mencionaron que el sindicato de Miguel Trujillo López, estaba presionándolos para que voten el martes 17 agosto en sentido positivo a la legitimación del Contrato Colectivo de Trabajo (CCT).
La Red está conformada por trabajadores tanto de Argentina, Brasil, Colombia y México, mismos que están afiliados a Industriall Global Unión, quienes a través de una carta, exigen que se respete la libertad sindical durante la nueva votación a realizarse este martes y miércoles 17 y 18 de agosto, en las instalaciones del Hotel Holliday Inn de Silao.
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León, Gto.- La Red de Trabajadores de General Motors en América Latina, exige que se respete a los colaboradores de la planta en Silao, debido a que los mismos les mencionaron que el sindicato de Miguel Trujillo López, estaba presionándolos para que voten el martes 17 agosto en sentido positivo a la legitimación del Contrato Colectivo de Trabajo (CCT).
La Red está conformada por trabajadores tanto de Argentina, Brasil, Colombia y México, mismos que están afiliados a Industriall Global Unión, quienes a través de una carta, exigen que se respete la libertad sindical durante la nueva votación a realizarse este martes y miércoles 17 y 18 de agosto, en las instalaciones del Hotel Holliday Inn de Silao.
Los integrantes de la red sindical informaron que los trabajadores de la planta armadora GM en Silao, dijeron que el sindicato de Miguel Trujillo López, afiliado a la Confederación de Trabajadores de México (CTM), les promete rifas, dinero en efectivo, prometiendo dádivas y amenazando con que en la empresa se va a ir quien vote en sentido negativo por la legitimación del CCT, además de que perderán sus beneficios.
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“El Gobierno de Estados Unidos y el Gobierno de México alcanzaron un acuerdo recientemente para establecer un Plan de remediación integral para abordar la denegación al derecho a la libre asociación y negociación colectiva que enfrentaron los trabajadores de la planta de GM en Silao durante la votación de abril”, se informó en la postura oficial.
En el Plan mencionado establecieron que México investigará y sancionará a los responsables de cualquier violación a la ley relacionada con dicha votación, Mientras que la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) supervisará la nueva votación de agosto, así otras instancias, tales como el Instituto Nacional Electoral (INE) y la Organización Internacional del Trabajo (OIT), misma que garantizará que el área de votación sea segura y las boletas estén protegidas.
Además, desde el 09 de julio del presente año los inspectores federales de STPS estuvieron presentes en la instalación para garantizar que la votación esté libre de intimidación y coerción.
También acordaron que OIT enviará observadores internacionales a la votación y en el período previo a la votación, para ayudar a garantizar que se anote y documente cualquier irregularidad. Del mismo modo, el Instituto Nacional Electoral de México enviará observadores nacionales a la votación para ayudar a asegurar que cualquier irregularidad sea notada y documentada.
En cuanto a General Motors, los gobiernos de América del norte informaron que la empresa emitirá una declaración de neutralidad y una política de tolerancia cero por represalias. Los integrantes de la Red de Trabajadores de General Motors América Latina, consideran que todos los colaboradores automotores mexicanos tienen derecho a que los represente un sindicato elegido democráticamente y a la negociación colectiva, libre y justa.
Expresaron que por varios años se les han negado derechos sistemáticamente a muchos trabajadores de distintas ramas industriales, incluida la automotriz, a través de los llamados contratos de producción y sindicatos ilegítimos.
Los afiliados a Industriall Global Unión solicitan también a General Motors, que trabaje de manera proactiva con las autoridades mexicanas y estadounidenses, para lograr una votación secreta, justa y transparente y sin obstáculos y que se respete la decisión de los trabajadores.