La pandemia por el coronavirus y la modalidad virtual en las escuelas no es excusa para recortar el apoyo a la educación, señalaron docentes y padres de familia de Misión Rescate México, quienes mencionaron que el recorte de alrededor de cuatro mil 500 millones de pesos de los apoyos educativos que se tienen contemplados en el Presupuesto de Egresos de la Federación 2021, pone en riesgo el avance educativo del país y el futuro de miles de niños y jóvenes.
Carlos Aguirre Marín, director nacional de la Alianza de Maestros e integrante de Misión Rescate México, aseguró que hay preocupación en los padres de familias y en los maestros, ya que el Gobierno Federal ha demostrado que la educación no es una prioridad para los mexicanos, y ejemplo de ello, es el recorte presupuestal de cuatro mil 500 millones de pesos para 2021, donde se tiene previsto afecte a todo el sector educativo, desde nivel básico hasta superior.
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Explicaron que de acuerdo con el Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP), algunos de los recortes están destinados a importantes programas en la educación inicial, los cuales presentarán reducción de entre 3.5 y 4.5%, así como disminución de hasta 62% en otros programas como el de Escuelas de Tiempo Completo, el Programa Nacional de Reconstrucción y el Programa de Becas Elisa Acuña.
Sin embargo, los integrantes de Misión Rescate México los apoyos a educación media superior tienen crecimiento de hasta 6.2%, y educación superior hasta 1.3%, pero dicho incremento será destinado a los programas federales como la Beca Benito Juárez y Jóvenes Escribiendo el Futuro.
Por ese motivo, señalaron que es preocupante que dicho apoyo sea utilizado con fines electorales, por lo que solicitaron a la Federación la reorientación y actualización del recurso, donde se reasigne de manera justa y equitativa por el futuro de los niños y jóvenes del país.
Además, pidieron que el presupuesto no sea usado para otros fines ajenos al fortalecimiento del sistema educativo, ya que ese apoyo es todavía más urgente por la contingencia sanitaria, y la Federación debe darse cuenta de la necesidad que tienen las escuelas para adaptarse a la nueva normalidad.
“El presupuesto debe ser reorientado y actualizado de acuerdo con la nueva realidad social y educativa que hoy vivimos (...) se equivoca quien piense que por la pandemia y porque las clases son virtuales, los costos disminuyeron, necesitamos reorientar los recursos para apoyar a muchos alumnos que necesitan, las herramientas, la conectividad y espacios para que puedan tomar sus clases”.