La actividad que realizan menores en la calle les puede generar ganancias de hasta 350 pesos al día, algunos lavan parabrisas, hacen acrobacias, entre otras cosas, pero estas se incrementa durante el periodo de vacaciones y no son por necesidad en el seno de las familia es por decisión propia, compartió Sofía Canales Román, directora de Atención a Niñas, Niños y Adolescentes del DIF municipal.
Las niñas, niños y adolescentes que trabajan en calle oscilan entre 12 y 17 años, siendo el 80% varones, se ubican los principales cruceros de la ciudad, entre ellos los de Poliforum, y en el cruce de los bulevares Adolfo López Mateos y La Luz.
Recalcó que se invita a no dar dinero a menores, con el fin de evitar exponerlos a riesgos como ser atropellados, que manejen fuego y solventes, y que alguna persona mayor pueda contactarlos para cometer hechos delictivos.
Comentó que cuentan con la coordinación de Unidad de Atención Inmediata, y atienden a los menores en situación de crucero, que durante los periodos vacacionales aumenta.
Después de que hacen contacto y evalúan cada caso, personal del DIF los canaliza al área jurídica, psicológica o de trabajo social, lo que dependerá de cada situación, por lo que se apoyan con las diferentes instituciones.
“Hemos detectado situaciones en las cuales los adolescentes son los que salen de casa, ya no quisieron estudiar y salen a trabajar, no es tanto que sus padres los manden”, aseguró.
Muchos de estos menores no permiten que personal del DIF se acerque, debido a que corren, por lo que pidió que los padres o tutores de los menores sean ellos los que busquen a la entidad a fin de que les brinden herramientas para la vida familiar y laboral.
Trabajo transversal con dependencias
Informó que tienen el proyecto de trabajar de manera transversal con un modelo de atención que incremente sus habilidades, por lo que así ven con qué dependencias se puede pedir apoyo para que tengan un trabajo y escuela por lo que están de la mano con Educación en el municipio.
Dijo que a través de los programas del Instituto Municipal de la Juventud los incentivan mucho a trabajar, también los pueden encaminar a la Casa de la Juventud.
Entre otros talleres tienen serigrafía, estudio fotográfico, impresión en 3D, cabina de edición, estudio de grabación, cabina de audio, corte láser.
Hay actividades deportivas, de enseñanza en el tema de barbería, pintura de murales, talleres de arte-oficio.
El DIF realiza un diagnóstico dos veces al año, en los meses de febrero y noviembre para detectar y ubicar a los menores en los cruceros que están identificados y cada año reinciden.
Informó que sobre todo en cuestión de adolescentes se presentan muchas las reincidencias, pues muchos ya tienen identificados sus cruceros.
“Mientras (las personas) sigan aportando, las niñas, niños y adolescentes que estén en riesgo en esa situación van a continuar”, lamentó.
Cuando se detecte a una menor que trabaja en la calle, en especial en ese tipo de cruceros se puede llamar al teléfono 477 251 42 11 y con terminación 12 de lunes a viernes y también se pueden poner los reportes de niñas, niños y adolescentes en riesgo el Whatsapp es 477 128 18 45.