La Zoonosis son enfermedades infecciosas que son transmisibles de animales vertebrados a los seres humanos, aunque la más conocida es la rabia, existen algunas otras que pudieran ser de alto riesgo para las personas.
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La Secretaría de Salud del Estado de Guanajuato, a través de la Jurisdicción Sanitaria VI se mantiene en constante vigilancia de las distintas enfermedades, desde la labor preventiva, hasta el tratamiento de las infecciones.
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Sin embargo en temas de prevención no se trata de evitar o temer de animales de compañía o silvestres, sino de tomar algunas medidas precautorias para mantener a las familias a salvo.
El coordinador de epidemiología de la Jurisdicción Sanitaria VI, Gerardo Alejandro Ledezma Zárate, nombró algunas de estas infecciones, las cuales son motivo de constante vigilancia, y de las cuales, algunas ya han presentado casos en el estado, los esfuerzos de la SSEG van desde lo preventivo hasta la atención adecuada de cada caso.
Si bien el estado de Guanajuato se ha mantenido libre de rabia humana desde 1993, otros estados han tenido ya casos de rabia humana relacionada a murciélagos silvestres, pero también a mascotas que pueden cazar y ser atacadas por estos, como lo pueden ser los gatos.
“Tenemos que estar al pendiente de nuestros animales de compañía, detectar conductas inusuales, que estén agresivos, o no beban agua o coman y que hayan sido atacados por algún animal que pueda transmitir la rabia”.
Las labores preventivas deben abarcar a las personas pero también a las mascotas para prevenir que vuelva a aparecer esta enfermedad en el estado, señaló.
Por otra parte, existen otras enfermedades como la cisticercosis, leptospirosis y brucelosis, esta última ha hecho aparición ya en comunidades de Pénjamo durante los últimos dos años, donde se tiene registro de 22 casos.
La infección por brucelosis se relaciona con el consumo de productos lácteos no procesados, es decir sin pasteurizar, quesos, cremas, etcétera, al estar contaminados podrían generar distintas sintomatologías a las personas que son fiebres altas, generalmente vespertinas, dolor de estomago, nauseas, vómitos, entre otros, que sin tratamiento pueden llegar a ocasionar abortos y que se requiera la hospitalización.
“Tenemos bajo vigilancia epidemiológica esta enfermedad que estamos localizando en comunidades de Pénjamo que son principales productoras de productos lácteos”.
La recomendación es consumir alimentos que estén etiquetados para saber si estos fueron debidamente procesados, autoridades de salud ofrecen para los productores los talleres de pasteurización para evitar que puedan propagarse estas enfermedades.
“Sabemos que es muy rico un queso de cabra, una tostadita de requesón, pero se debe verificar el debido proceso para evitar casos de brucelosis”.
En el caso de la cisticercosis, esta enfermedad se relaciona al consumo de carne contaminada y con un proceso de cocción adecuado, los síntomas pueden manifestarse en forma de convulsiones y ataques epilépticos, de presentarse es indispensable acudir al centro de salud más cercano para realizar los análisis correspondientes.
Por otro lado se encuentra la leptospirosis que se relaciona con el contacto con roedores, en este caso la enfermedad también manifiesta distinta sintomatología y se presenta en personas que viven en condiciones de hacinamiento, las medidas precautorias son simples y constan de mantener las viviendas y patios limpios para evitar que los roedores puedan transmitir esta enfermedad.
Las autoridades de salud mantienen campañas de sensibilización ante estas enfermedades, para que en caso de detectarlas estas puedan ser atendidas de inmediato y evitar casos graves o defunciones, de tal forma que durante los últimos años no se ha presentado ninguna muerte por este tipo de enfermedades.
Ante cualquier síntoma sospechoso se recomienda a la población acudir a su centro de salud más cercano y seguir al pie de la letra los tratamientos que el médico indica, pues algunas personas suelen dejar los tratamientos cuando comienzan a sentirse mejor, lo cual podría generar una recaída y la resistencia de las infecciones al medicamento.
“Sabemos que los tratamientos de algunas de estas enfermedades pueden llegar a ser largos, pero deben seguirse de inicio a fin siempre”.