Guanajuato, Gto. El Museo del Pueblo, ubicado a un lado de las escalinatas de la Universidad de Guanajuato, en la calle Positos, es de los recintos más arraigados para la capital del estado.
En esta ocasión nos trae una nueva experiencia con tres exposiciones de artistas contemporáneos guanajuatenses y pintores mexicanos.
Una de las exposiciones más esperadas es la de “Feliciano Peña, entre sierras y costumbres”, pues es un reconocimiento a la trayectoria del pintor guanajuatense a 108 años de su nacimiento y 41 de su fallecimiento.
La misma se encuentra en la Sala Gorky González, y es un reconocimiento al trabajo y trayectoria del artista guanajuatense, nacido en Silao, que plasmó la belleza natural del Bajío a través de dibujos, óleos y grabados, rememorando así escenarios cotidianos de principios del siglo XX.
La exposición muestra 40 obras en total con técnicas como el grabado, carboncillo, gráfica, óleo sobre tela, acuarela, dibujo y lápiz de grafito sobre papel.
También se encuentra en el museo del Pueblo la exposición “El ritmo y el espacio”, es una colectiva en la que participan obras de los tres artistas seleccionados en la convocatoria de portafolios artísticos Randy Walz 2023. Todos con sus respectivas visiones con respecto al paisaje, que como espejo incide en la nostalgia, misterio y obsesiones de quien lo observa.
Las ocho obras de Shiho Sato, en óleo sobre tela, se relacionan con el sonido sutil que se cuela entre el caos y vorágine de la ciudad, y que solo puede ser escuchado por quien está inmerso en su soledad y por ello puede percibir la armonía dentro del caos, formando conexiones sensoriales y armonías a través del trazo.
Por su parte, Samuel Pérez, originario de Celaya, muestra la plenitud a través de los 10 paisajes naturales y locales plasmados en óleo sobre tela: llanuras, planicies y parcelas que evocan a su abuelo y que refleja su obsesión con surcos y labranzas que rompen con el realismo figurativo.
Carolina Parra aborda su preocupación a través de una serie de grabados, diez en total, elaborados con diferentes técnicas, mostrando la capacidad metafórica del paisaje híbrido en espacios libres y destacando la belleza de las ondas en el agua y las raíces en monotipos y litografías en aluminio y grabados en madera con la técnica de plata perdida.
En la sala Siqueiros encontrarán “Trazo y libertad”. Colección de dibujo y artes gráficas de General Motors de México y que por primera vez presenta obras selectas de la empresa automotriz en conjunto con acervo del propio instituto. Las 62 obras, que en conjunto muestran múltiples técnicas y procedimientos, se dividen en tres etapas: principios, mediados y finales del siglo XX.
La colección, constituida en la década de los sesenta, reúne aspectos nacionalistas de grandes artistas mexicanos que plasmaron lo que en su momento vivían a través de la gráfica como medio de expresión, mostrando también su evolución en una nutrida variedad de estilos y técnicas.
Las exposiciones estarán disponibles hasta el 28 de abril.