Fue lanzado el 27 de diciembre de 2018 y se llamó Plan Conjunto de Atención a Instalaciones Estratégicas de Pemex. Era la estrategia federal para contener el robo de hidrocarburo en el país, que, para entonces y de acuerdo con el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, significaba para el país una pérdida por hasta 60 mil millones de pesos.
No obstante, cinco años y medio después, los datos federales indican que las tomas clandestinas en los ductos de Petróleos Mexicanos (Pemex) no pararon, sino que incluso incrementaron 59.4%, esto en comparación con los reportes que la Empresa Productiva del Estado.
De acuerdo con cifras de Pemex, proporcionados a través de solicitudes de acceso a la información, del primero de enero de 2019 al 30 de junio de 2024, en México fueron detectadas 69 mil 567 tomas clandestinas en ductos de la Empresa Productiva del Estado, mientras que durante el sexenio de Enrique Peña Nieto, particularmente del periodo del primero de enero de 2013 al 30 de noviembre de 2018, hubo en total 43 mil 620 tomas clandestinas, lo que hasta entonces lo colocaba como el sexenio en donde fueron reportadas más ordeñas ilegales de los ductos de petróleos, pues en el sexenio de Felipe Calderón, en el periodo del primero de enero de 2007 al 30 de noviembre de 2012, fueron detectadas tres mil 230 picaduras de ductos.
Delito diversificado
Cuando comenzó a darse el incremento en la aparición de tomas clandestinas en los ductos de Pemex, estados como Guanajuato, Hidalgo, Puebla y Tamaulipas lideraban las listas de los lugares en donde había la mayor cantidad de reportes.
Te Puede Interesar:
Sin embargo, para el primer semestre de 2024, estados como Jalisco, Nuevo León o Coahuila han aparecido en el listado y antes no figuraban en las primeras posiciones.
De acuerdo con datos de Pemex, durante el primer semestre de 2024, si bien hubo una disminución en la cantidad de tomas clandestinas detectadas en el país, al ser reportadas cinco mil 757 contra las seis mil seis que hubo en el mismo periodo de 2023, lo que destaca es que incrementos en estados en donde la ordeña ilegal de ductos no era tan común.
Por ejemplo, aunque Hidalgo aparece en primer lugar con más tomas clandestinas, con mil 337 casos reportados, esto significó una disminución de 38.1% con relación al mismo periodo, donde fueron detectadas dos mil 160 ordeñas ilegales de ductos.
En segundo lugar aparece Jalisco, con mil 121 tomas clandestinas detectadas, lo que significó un incremento de 14.8%, pues en el primer semestre de 2023 en esa entidad fueron reportadas 976 ordeñas ilegales de ductos.
Tamaulipas se coloca en la tercera posición, con 732 tomas clandestinas, cuando en el primer semestre de 2023 fueron 432 las detectadas.
Guanajuato se colocó en cuarto lugar durante el primer semestre de 2024, pues en este estado incrementaron las tomas clandestinas, pues pasaron de 252 detectadas durante los primeros seis meses de 2023 a 421 en el mismo periodo de este año.
Nuevo León, que aparecía de media tabla para abajo en el hallazgo de tomas clandestinas, se colocó en el quinto lugar en el primer semestre de 2024, pues en este territorio fueron encontradas 380 ordeñas ilegales de hidrocarburo, contra las 238 halladas en el mismo periodo de 2023.
Puebla aparece en la sexta posición, con 369 tomas clandestinas detectadas de enero a junio de 2024, contra las 226 que fueron reportadas en el primer semestre de 2023.
El reporte de Pemex indica que en promedio, cada 45 minutos fue detectada una toma clandestina en el país durante el primer semestre del año, tiempo que se ha mantenido a lo largo del sexenio, pues oscila entre los 43 y 50 minutos, lo cual indica que hay una tendencia sostenida en cuanto a este ilícito.
Delito rentable
Especialistas en temas de seguridad, como el consultor David Saucedo Torres, han señalado que el robo de hidrocarburo es una práctica rentable para los grupos de la delincuencia organizada, pues a diferencia de la fabricación de drogas sintéticas o siembra de marihuana, para la ordeña de hidrocarburo se requiere de poca inversión: lo que se vaya a destinar para corromper a funcionarios de Pemex o incluso elementos de la Guardia Nacional encargados de la vigilancia de los ductos, el pago del personal especializado para extraer el hidrocarburo y es todo.
La presunta complicidad de elementos de la Guardia Nacional en el robo de hidrocarburos es un tema que la propia Secretaría de la Defensa Nacional es un tema que tiene detectado, al menos así lo reveló un documento hecho público por la organización hacktivista Guacamaya.
De acuerdo con el documento, fechado en mayo de 2020, José Trinidad Zarco, alias El Padrino y líder de un grupo dedicado al robo del gas LP en el Estado de México, tejió una alianza con José Antonio Yépez, alias El Marro, exlíder del Cártel de Santa Rosa de Lima, para detonar el hurto de este combustible en Guanajuato y para ello tuvieron que sobornar a elementos de la Guarida Nacional para hacer el trasiego del hidrocarburo por carreteras federales, con un pago de 200 mil pesos por noche; los cargamentos salían dos veces a la semana de Guanajuato hacían el Estado de México.
➡ Suscríbete a nuestra edición digital
Sin embargo, especialistas como David Saucedo aseguran que el robo de hidrocarburo dejó de ser el causal de la violencia entre bandas del crimen organizado, como sí lo fue entre 2017 y 2018, particularmente en Guanajuato, en donde el control por este delito llevó inició la disputa entre el Cártel Santa Rosa de Lima, que tenía el monopolio de este ilícito, y el Cártel Jalisco Nueva Generación; ahora es sólo una fuente más de financiamiento para continuar con sus actividades ilícitas, particularmente la venta de metanfetaminas en el centro del país.