León, Gto.- Yoseline Parra Flores y Juan Salvador Luna Fernández buscan dignificar el mezquite como un alimento ancestral, con la vaina del árbol elaboran harina, tostado, pinole y mazapán de mezquite.
“Queremos llegar a dignificar el mezquite como un alimento ancestral, hay dato que en Tehuacán hace 5 mil 800 años antes de Cristo, ya se utilizaba la vaina del mezquite como alimento, queremos llegar a que se vuelva hacer tortilla con mezquite, gordita y atole con mezquite porque esto tiene gran cantidad de minerales y nutrientes”, mencionó Juan Salvador.
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Explicó que su objetivo es volver a poner en los ojos de las juventudes el comer mezquite, indicó que “El árbol de los secretos” como también es conocido es resistente a condiciones climáticas adversas. Puede soportar altas temperaturas, sequías prolongadas y suelos pobres en nutrientes.
Comentó que la vaina se da a finales de mayo, junio y julio después de la floración en abril y mayo, es una leguminosa con contenidos de azúcares dependiendo de su especie, lugar y momento de recolección.
Así inició el sueño
En el municipio de Silao, la joven pareja comenzó hace siete años a estudiar las propiedades de las vainas, en su investigación se dieron cuenta que era un desperdicio que estas cayeran al piso y fueran pisoteadas, como ingenieros en alimentos comenzaron a elaborar harina, salvado, tostado, tostado cacao pues tiene alta carga de aminoácidos, carbohidratos, flavonoides y minerales que ayudan a las personas estar más sanos y fuertes, así nació su marca Mezquilate.
“El mezquite es un alimento ancestral que era comido por nuestros ancestros, las nuevas generaciones ya no conocen sus propiedades, minerales, azúcares y aminoácidos. Desde Silao volvimos a nuestras raíces colocándolo en la mesa de las casas”, manifestó.
Juan Salvador informó que a pesar de ser un emprendimiento familiar que inició junto con su esposa Yoselín, ahora adoptaron el concepto de la “manada”, es decir colaborar con un grupo de amigos con la finalidad de que se extienda a más personas y llegue a más lugares.
Para finalizar, dijo que la vaina del mezquite la compran en las comunidades de Silao, por el kilo pagan 15 pesos ya una vez procesada, los kilos de tostado cuesta 220, el kilo de harina 180 mientras que un kilo de salvado a 160 pesos.
“Son precios elevados porque somos artesanales, no hemos crecido en maquinaria y todo lo hacemos manual y pequeñas máquinas”, finalizó.