Por reportes a la redacción de la OEM en León, donde acusan el maltrato y golpes a los internos del anexo “Cristo te Ama” en la colonia Piletas, se pidió el derecho de réplica a los acusados, mostrándonos sus instalaciones.
Como proceso de investigación se dio con el lugar, edificado en una casa de la calle Hierro en el número 1510, muy localizable a la hora de pedir referencias a los vecinos.
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A la puerta de acceso, resguardada con malla, cerrojo y candado donde nos recibieron al equipo de información de esta casa editora para exponer la problemática con el encargado o “padrino”, Leandro Merino Torres, recibiéndonos y otorgando el paso al anexo para tratar adicción a las drogas y alcohol.
Actualmente atienden a 41 hombres por distintos problemas entre ellos, menores de edad, adolescentes y adultos todos regidos por el concepto de buena voluntad a la hora de hacer y pedir algo dentro del grupo como filosofía.
Al informarle al padrino Leandro, ya en el interior del inmueble la intención de nuestra búsqueda (reportero y fotógrafo) y acercamiento con ellos, nos dijo, “Quieres que le hable a la gente; traite a 20 cabrones Canchola de buena voluntad”.
A los cinco minutos de haber dado la orden el padrino, un grupo de hombres empezó a acomodar sillas metálicas plegables en un cuarto y posterior un grupo de personas ocupó los lugares para nosotros cuestionarlos de los tratos que ahí reciben, en este recinto no del todo acondicionado para tratar estas enfermedades.
“Qué se diga lo que se va a hablar, porque no se vale que yo te doy la chanza de que pasen para que se aclare y salgan otras palabras”, advirtió Leandro Merino Torres antes de cuestionar a los jóvenes ahí atendidos.
“Trato de que no haya golpes y maltratos, el maltrato lo hace el que llega, no yo; cuando llegan aquí las personas tienen broncas y se provocan conflictos entre ellos; por eso te doy chance de que entres y veas que no están golpeados o maltratados”, indicó Leandro Merino.
¿Cuánto tiempo llevas aquí?
“Un mes y nos tratan a todo dar, dentro de lo que cabe yo llevo un mes aquí y créame que me siento mucho mejor que allá afuera”, indicó uno de los internos.
¿Cómo te tratan?
“Uno en la calle no valora, no tiene conciencia de su familia y gracias a las pláticas que el padrino nos da, estoy tratando de retomar otro tipo de vida, para mí ha sido un combo de vida muy drástico ya en la calle estaba muy mal”, comentó otro de los jóvenes ahí atendido.
“Aquí no se nos golpea, tenemos nuestras comidas, tenemos un trato muy bonito, tenemos televisión, recogido, nos dan fruta y no nos falta nada, está bien agusto y bien tranquilo”, explicó otro de los jóvenes.
Luego de la audiencia con el grupo de 20 personas, nos dieron un recorrido por las instalaciones, dormitorio con varias literas, cocina y sala de juntas, las carencias existentes resaltan a la vista, pues esta organización trabaja con las aportaciones de los padres de familia, que buscan ayuda para su familiar drogadicto o alcohólico.
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