A pesar que el área de bancas y del kiosko permanece cerrada, la zona peatonal del jardín principal luce llena de personas, algunas de ellas acuden a realizar compras en establecimientos del lugar, otras se dirigen al palacio municipal para realizar algún trámite en presidencia municipal.

Pese que la autoridad estatal mantiene el color naranja en el semáforo de actividades y que limita la presencia de personas en lugares públicos, el primer cuadro de la ciudad luce abarrotado.

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Por medio de un recorrido la mañana de este viernes, se constató que las cintas en color amarillo y algunas de las barreras metálicas que han sido colocadas por el municipio en las bancas y área de jardines, parecen no detener el deseo de los leoneses pasear o incluso de buscar la oportunidad de ocupar una banca para descansar.

A cuatro meses que el mismo lugar lucía desértico cercado y custodiado por elementos de policía municipal, hoy es todo lo contrario, la presencia de algunos vendedores de globos, artistas urbanos y promotores de servicios, forman parte del paisaje que muestra el centro de la ciudad.

La presencia de familias enteras, algunas con niños menores, adultos mayores, y jóvenes, que recorren la zona peatonal con el uso del cubrebocas pareciera que la pandemia no es ningún impedimento para llevar una vida con total normalidad.

Un guardián del orden asignado a la zona peatonal, llegó incluso a comparar la mañana del viernes con un sábado familiar por la tarde, pero lo peor de la situación es que sigue existiendo la resistencia de algunas personas al uso de cubrebocas y de guardar la sana distancia personas .