Talina Fernández no sólo ha dejado su legado artístico en la televisión mexicana y del público que la siguió a lo largo de su trayectoria, también ha dejado huella en los corazones de sus varias amistades como lo fueron las periodistas y presentadoras Lolita Ayala y Virginia Sendel.
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En la adolescencia
Su amistad con Lolita Ayala comenzó mucho antes de iniciar sus respectivas carreras, se conocieron cuando eran adolescentes.
“La dama del buen decir” compartió en el programa Sale el Sol que en 1961, su amiga Lolita fue enviada por su familia a estudiar en la St. Mary’s Academy en Nauvoo, Illinois, una escuela de madres benedictas.
Ahí mismo estudiaba Talina, sólo que ella era tres años mayor, por lo que no eran compañeras de clase ni de dormitorio. Lolita extrañaba tanto a su familia que la Madre Superiora le pidió a Talina recibir a su compañera mexicana para hacerla sentir más cerca de su hogar.
Así inició su amistad y en 1963, la mamá de Mariana Levy, se graduó y regresó a México, por su parte, Lolita volvió al país hasta 1970, año en el que se incorporó al equipo de noticias de lo que eventualmente sería Televisa y fue hasta entonces que recuperaron contacto y forjaron una amistad de alrededor de 60 años.
Junto con otras figuras como Patricia Suárez, María Victoria Llamas, la fallecida Lourdes Guerrero, Rocío Villagarcía y Virginia Sendel, se convirtieron en pioneras de los noticieros y programas de revista en México.
Al darse a conocer el fallecimiento de la conductora, Lolita Ayala compartió en su cuenta de Twitter una foto y un emotivo mensaje de despedida: “Mi Talis preciosa, mi amiga y hermana, gracias por tantas memorias”.
¿Amigas y rivales?
En el matutino Sale el Sol, del que Talina fue conductora, recibió la visita de su amiga Virginia Sendel y revelaron algunos detalles del inicio de su amistad, pero detallaron que al principio fueron rivales de amor.
“Somos dos grandes amigas, pero al principio fuimos enemigas. A los 14 años compartimos un novio; yo iba al Colegio Alemán y tenía un novio en la mañana, ese mismo ingrato en la tarde jugaba tenis con ella porque era la campeona mundial de tenis. Entonces, en la mañana era mi novio y en la tarde era el novio de Virginia, y a las dos nos contaba porque era un cruel”, contó la presentadora en esa ocasión.
Por su parte, la fundadora de la asociación Michou y Mau, compartió que su amistad había perdurado debido a que las estaban una para la otra en los momentos difíciles.
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"Una amistad así dura en las buenas y en las malas, sobre todo con el apoyo que sientes en las malas. Es el poder entender a alguien realmente a fondo, porque ese dolor, esas pérdidas, quien las ha tenido sabe cómo manejarlas. Las dos tenemos un carácter muy fuerte, somos muy diferentes, pero nos complementamos como amigas", pues añadió que “Hemos estado una para la otra porque sabemos lo que siente la muerte de una hija”.
Publicado originalmente en El Sol de León
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