La administración federal de Claudia Sheinbaum enfrentará dos principales retos: un control de déficit fiscal y aliviar la situación financiera de Petróleos Mexicanos (Pemex), advirtió Fitch Ratings.
De acuerdo con la agencia calificadora, si bien el nuevo gobierno heredará una economía estable, se prevé un incremento del déficit fiscal para este año debido al aumento del gasto social y mayores costos financieros de la deuda.
Bajo este escenario, Fitch Ratings espera que la deuda del gobierno general aumente hasta el 48.8 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) en 2024, desde el 45.6 por ciento previo.
Si bien la administración entrante ha manifestado su voluntad de reducir el déficit a niveles consistentes con una trayectoria estable, persiste la incertidumbre sobre cómo se logrará. El apetito político por una reforma para mejorar la recaudación de impuestos sigue sin estar claro.Fitch Ratings.
Agregó que el apoyo continuo a Pemex todavía representa un reto adicional para las finanzas del país.
Fitch Ratings estimó que en los últimos cinco años el gobierno federal ha brindado apoyos por alrededor de 70 mil millones de dólares, que representan hasta cuatro por ciento del PIB.
La administración entrante ha abogado por mantener el importante papel de Pemex en el mercado petrolero del país, lo que implicará transferencias continuas del gobierno federal en ausencia de mejoras significativas en la eficiencia operativa de la compañía.Fitch Ratings.
La mayoría de Morena en el Congreso facilitará la aprobación de presupuestos: Fitch Ratings
De acuerdo con el Programa de Resultados Electorales Preliminares (PREP), con el 91.4 por ciento de actas capturadas a las 14:30 horas del 3 de junio, Claudia Sheinbaum ganó las elecciones presidenciales con un 59.12 por ciento de los votos.
La morenista obtuvo un amplio margen de ventaja frente a la oposición de Xóchitl Gálvez y Jorge Álvarez Máynez, quienes obtuvieron el 27.8 y 10.46 por ciento de los sufragios, respectivamente.
Además, se espera que Morena y sus aliados obtengan mayoría calificada en la Cámara de Diputados, mientras que en el Senado se proyecta una mayoría simple con arriba del 50 por ciento de los curules.
De acuerdo con Fitch Ratings, esto facilitará la aprobación de los presupuestos económicos con facilidad, al igual que asegurar la aprobación de eventuales reformas constitucionales.
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“La economía debería seguir beneficiándose de una tendencia estructural de nearshoring, aunque las políticas de la nueva administración podrían influir en el atractivo de México. Si esto fuera suficiente para impulsar de manera duradera las perspectivas de inversión y crecimiento, entonces podría convertirse en un respaldo para la calificación soberana”, concluyó la agencia de riesgo crediticio.
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