/ domingo 24 de diciembre de 2017

Reyes, santos o brujas: ¿Quién trae los regalos por Navidad?

Los encargados de llevar la alegría a millones de hogares varían -y mucho- según la tradición de cada país

La Navidad está a punto de llegar y, con ella, los esperados regalos. Sin embargo, los encargados de llevar la alegría a millones de hogares varían -y mucho- según la tradición de cada país.

 

 

SANKT NIKOLAUS: El San Nicolás alemán tiene su origen principalmente en el obispo de Mira (Turquía), que falleció al parecer el 6 de diciembre del año 343 y tenía fama de ser muy generoso. Según la leyenda, daba dinero a escondidas a las niñas para que pudieran pagar los impuestos. La tradición de entrega de regalos durante la noche se remonta al siglo XV, pero no es hasta el siglo XVII cuando el santo pasa a protagonizarla en persona. A los niños que se han portado mal, es su ayudante Ruprecht el que les trae carbón.

 

SINTERKLAAS: En Holanda y parte de Bélgica, esta variante de San Nicolás llega en barco procedente, según la leyenda, de España. Cada año desembarca en un puerto distinto acompañado de su paje, Pedro el Negro. Como entra en las casas por la chimenea, los niños acostumbran a poner delante de éstas los zapatos en la noche del 5 de diciembre para recibir los regalos a la mañana siguiente.

 

EL NIÑO JESÚS: Al parecer, fue el reformador Matín Lutero el que introdujo la tradición de que los regalos los entregara en Nochebuena el Niño Jesús por su oposición a la elevación de Nicolás a la categoría de santo. Actualmente, en las regiones católicas de Alemania y otros países los más pequeños de la casa dirigen sus cartas al Niño Jesús y en las evangélicas, es Papá Noel quien les trae los regalos.

 

PAPÁ NOEL/SANTA CLAUS: Tiene una larga barba blanca, una barriga notable, viste de rojo y carga sus regalos en un trineo con el que va de casa en casa. Al igual que la tradición del niño Jesús, la de Papá Noel (Noël es Navidad en francés) se instauró también en tiempos de la Reforma para trasladar el rito de San Nicolás a la Nochebuena. Éste había llegado a Estados Unidos de la mano de emigrantes holandeses, de ahí el nombre de Santa Claus y su aspecto inspirado en San Nicolás. No obstante, su imagen actual se debe a una campaña publicitaria de Coca-Cola de 1931. Además, algunas hipótesis lo asocian a los dioses Thor y Odin de la mitología escandinava.

 

NISSE: El nombre del duende encargado de traer los regalos en los países escandinavos seguramente tiene su origen en el nombre danés Niels (Nicolás). La variante noruega de Papá Noel, el Julenisse (Jul es Navidad en noruego), lleva un gorro rojo y también tiene una larga barba blanca, pero va enfundado en un grueso jersey y medias de punto tejidas a mano. Quienes quieran recibir sus regalos no deben olvidarse de dejar ante la puerta un plato con galletitas navideñas.

 

SAN BASILIO: En Grecia, San Nicolás tan sólo es el patrón de los marineros, pero para los regalos hay que esperar a San Basilio de Cesarea o Basilio el Grande. Éste llega en Nochevieja, de manera que el día de Año Nuevo los niños encuentran sus regalos debajo de la cama. San Basilio es uno de los padres de la Iglesia griega. Nacido en la actual Capadocia turca, predicaba que los ricos ayudaran a los pobres y fundó varios orfanatos y hogares para los ancianos. Al igual que Papá Noel, también viste de rojo y tiene una larga barba blanca y algunos kilos de más.

Foto: DPA

 

LOS REYES MAGOS: En España y parte de Latinoamérica, los regalos no llegan hasta el 6 de enero, día de la festividad católica de la Epifanía. La noche anterior, los tres Reyes Magos, Melchor, Gaspar y Baltasar, recorren el país en sus camellos y ayudados de sus pajes para repartirlos. La tradición tiene su origen en los Reyes Magos de Oriente, que siguiendo a una estrella llegaron a adorar al niño Jesús, al que entregaron oro, incienso y mirra. También en este caso los niños dejan sus zapatos para recibir los regalos. Si no han sido buenos, los reyes pueden hacérselo saber dejándoles carbón, aunque sea dulce.

Foto: DPA

 

LA BRUJA BEFANA: En Italia, Papá Noel empezó a llegar hace unos años, pues tradicionalmente era la bruja Befana la encargada de repartir los regalos en la noche del 5 al 6 de enero. Esta sonriente bruja buena hace el reparto volando con su escoba y, como suele entrar por las chimeneas, los niños colocan delante de éstas calcetines o zapatos que la bruja llena de dulces o chocolate si han sido buenos, o de carbón dulce si no lo fueron tanto. El nombre de Befana proviene de la festividad del 6 de enero, la Epifanía, y según la leyenda, era una anciana que ayudó a los Reyes Magos a encontrar al niño Jesús.

Foto: DPA

 

DED MOROZ: El Abuelo Frío o Abuelo de Hielo es la variante de Papá Noel en Rusia y Europa del Este. Su origen se remonta al siglo XIX, cuando el personaje comienza a aparecer en la literatura infantil, aunque como mera figura invernal. Durante la Unión Soviética, se convirtió en el sustituto socialista a las versiones occidentales y para evitar parecidos con Papá Noel se le puso un abrigo azul. Tras la caída de la URSS y la reintroducción de la Navidad ortodoxa, la tradición del Abuelo Frío se mantuvo. Según el calendario juliano, la Navidad es 13 días después del 25 de diciembre.

 

Foto: DPA

 

 

La Navidad está a punto de llegar y, con ella, los esperados regalos. Sin embargo, los encargados de llevar la alegría a millones de hogares varían -y mucho- según la tradición de cada país.

 

 

SANKT NIKOLAUS: El San Nicolás alemán tiene su origen principalmente en el obispo de Mira (Turquía), que falleció al parecer el 6 de diciembre del año 343 y tenía fama de ser muy generoso. Según la leyenda, daba dinero a escondidas a las niñas para que pudieran pagar los impuestos. La tradición de entrega de regalos durante la noche se remonta al siglo XV, pero no es hasta el siglo XVII cuando el santo pasa a protagonizarla en persona. A los niños que se han portado mal, es su ayudante Ruprecht el que les trae carbón.

 

SINTERKLAAS: En Holanda y parte de Bélgica, esta variante de San Nicolás llega en barco procedente, según la leyenda, de España. Cada año desembarca en un puerto distinto acompañado de su paje, Pedro el Negro. Como entra en las casas por la chimenea, los niños acostumbran a poner delante de éstas los zapatos en la noche del 5 de diciembre para recibir los regalos a la mañana siguiente.

 

EL NIÑO JESÚS: Al parecer, fue el reformador Matín Lutero el que introdujo la tradición de que los regalos los entregara en Nochebuena el Niño Jesús por su oposición a la elevación de Nicolás a la categoría de santo. Actualmente, en las regiones católicas de Alemania y otros países los más pequeños de la casa dirigen sus cartas al Niño Jesús y en las evangélicas, es Papá Noel quien les trae los regalos.

 

PAPÁ NOEL/SANTA CLAUS: Tiene una larga barba blanca, una barriga notable, viste de rojo y carga sus regalos en un trineo con el que va de casa en casa. Al igual que la tradición del niño Jesús, la de Papá Noel (Noël es Navidad en francés) se instauró también en tiempos de la Reforma para trasladar el rito de San Nicolás a la Nochebuena. Éste había llegado a Estados Unidos de la mano de emigrantes holandeses, de ahí el nombre de Santa Claus y su aspecto inspirado en San Nicolás. No obstante, su imagen actual se debe a una campaña publicitaria de Coca-Cola de 1931. Además, algunas hipótesis lo asocian a los dioses Thor y Odin de la mitología escandinava.

 

NISSE: El nombre del duende encargado de traer los regalos en los países escandinavos seguramente tiene su origen en el nombre danés Niels (Nicolás). La variante noruega de Papá Noel, el Julenisse (Jul es Navidad en noruego), lleva un gorro rojo y también tiene una larga barba blanca, pero va enfundado en un grueso jersey y medias de punto tejidas a mano. Quienes quieran recibir sus regalos no deben olvidarse de dejar ante la puerta un plato con galletitas navideñas.

 

SAN BASILIO: En Grecia, San Nicolás tan sólo es el patrón de los marineros, pero para los regalos hay que esperar a San Basilio de Cesarea o Basilio el Grande. Éste llega en Nochevieja, de manera que el día de Año Nuevo los niños encuentran sus regalos debajo de la cama. San Basilio es uno de los padres de la Iglesia griega. Nacido en la actual Capadocia turca, predicaba que los ricos ayudaran a los pobres y fundó varios orfanatos y hogares para los ancianos. Al igual que Papá Noel, también viste de rojo y tiene una larga barba blanca y algunos kilos de más.

Foto: DPA

 

LOS REYES MAGOS: En España y parte de Latinoamérica, los regalos no llegan hasta el 6 de enero, día de la festividad católica de la Epifanía. La noche anterior, los tres Reyes Magos, Melchor, Gaspar y Baltasar, recorren el país en sus camellos y ayudados de sus pajes para repartirlos. La tradición tiene su origen en los Reyes Magos de Oriente, que siguiendo a una estrella llegaron a adorar al niño Jesús, al que entregaron oro, incienso y mirra. También en este caso los niños dejan sus zapatos para recibir los regalos. Si no han sido buenos, los reyes pueden hacérselo saber dejándoles carbón, aunque sea dulce.

Foto: DPA

 

LA BRUJA BEFANA: En Italia, Papá Noel empezó a llegar hace unos años, pues tradicionalmente era la bruja Befana la encargada de repartir los regalos en la noche del 5 al 6 de enero. Esta sonriente bruja buena hace el reparto volando con su escoba y, como suele entrar por las chimeneas, los niños colocan delante de éstas calcetines o zapatos que la bruja llena de dulces o chocolate si han sido buenos, o de carbón dulce si no lo fueron tanto. El nombre de Befana proviene de la festividad del 6 de enero, la Epifanía, y según la leyenda, era una anciana que ayudó a los Reyes Magos a encontrar al niño Jesús.

Foto: DPA

 

DED MOROZ: El Abuelo Frío o Abuelo de Hielo es la variante de Papá Noel en Rusia y Europa del Este. Su origen se remonta al siglo XIX, cuando el personaje comienza a aparecer en la literatura infantil, aunque como mera figura invernal. Durante la Unión Soviética, se convirtió en el sustituto socialista a las versiones occidentales y para evitar parecidos con Papá Noel se le puso un abrigo azul. Tras la caída de la URSS y la reintroducción de la Navidad ortodoxa, la tradición del Abuelo Frío se mantuvo. Según el calendario juliano, la Navidad es 13 días después del 25 de diciembre.

 

Foto: DPA

 

 

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