En México hay una larga lista de lomitos que se han ganado el corazón de las personas, como Frida o Tango luego de su participación en la búsqueda de desaparecidos tras el 19-S, y ahora se suma el comandante Coyote, un perrito callejero que pasó del abandono a ser un elemento de la Guardia Civil de San Luis Potosí.
Coyotito, como policías de la Guardia Civil bautizaron al can, llegó siendo apenas un cachorro a las instalaciones de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) de San Luis Potosí.
Al principio el cachorro buscó integrarse a una manada que rondaba en los alrededores y que era alimentada por vecinos de la zona; sin embargo, los otros perros lo rechazaban constantemente cuando intentaba acercarse por agua o comida.
Pero la suerte del lomito cambió cuando se acercó a la caseta exterior de la SSPC, donde elementos de la Guardia Civil terminaron por tomarle cariño.
El tiempo en las calles había vuelto temeroso al cachorro, por lo que al principio no se acercaba demasiado a los policías, pero después de un tiempo rondando la caseta se familiarizó con los elementos, quienes comenzaron a alimentarlo y a resguardarlo del mal tiempo.
Ya siendo Coyotito, el lomito acompaña a los policías durante sus rondines alrededor de las instalaciones o hasta sus patrullas cuando salen, lo que le valió ser reconocido como miembro de la corporación de seguridad.
El perrito recibió un chaleco que lo identifica como elemento de la Guardia Civil y sus compañeros de vigilancia comenzaron a llamarlo comandante Coyote.
Además el comandate Coyote no es cualquier policía, ya que incluso el gobernador de San Luis Potosí, Ricardo Gallardo, ha reconocido al comprometido lomito, y dio a conocer que ya está recibiendo entrenamiento y quedará a cargo del Centro de Comando, Control, Cómputo, Comunicaciones y Contacto Ciudadano (C5).
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