León, Guanajuato; 23 de Mayo del 2019.- Los primeros 90 minutos de la final felina entre Tigres y León se fueron con desempeño arbitral fluido, la labor de Marco Ortiz y auxiliares no se manchó por polémicas o acciones que afectaran a alguno de los dos contendientes al título
En la primera mitad la labor de Marco Antonio Ortiz no fue muy exigida ya que ambas escuadras se concentraron en la labor táctica, en el trazo de los balones dejando en segundo término el juego físico y agresiones por lo que apenas se registraron cuatro faltas por parte de Tigres y tres fueron para León, William Tesillo fue el único amonestado.
La misma dosis siguió en el tiempo complementario, ‘Nacho’ Ambriz y ‘Tuca’ Ferretti jugaron sus fichas en la estrategia milimétrica y fair play. Fue hasta el 69’ que cayó la segunda tarjeta preventiva, ‘Toño’ Ortiz pintó de amarillo a Javier Meza luego de cortar un contrataque leonés con un golpe con el antebrazo a Jean Meneses.
Otro sancionado por parte de los regios fue Luis Quiñones al minuto 82’ a consecuencia de un jalón a William Tesillo y posteriormente fingir una falta y dejarse caer cuando el colombiano de la fiera busca controlar la pelota.
En el ocaso del encuentro el nazareno de Durango mostró la amarilla a Joel Campbell tras propinar una patada a Hugo Ayala cuando intentó rematar con la cabeza un balón aéreo, Fernando Navarro también vio el cartón amarillo por una barrida a Lucas Zelayarán.
Guido Pizarro fue sancionado por actitud antideportiva luego de exagerar una caída en el área verdiblanca intentando engañar al árbitro para que fuera señalado un penal en tiempo añadido. El primer capítulo de la final cerró con la ventaja por la mínima diferencia para Tigres. El desenlace será el domingo 26 en la cancha del Estadio Nou Camp.